Falta menos de una semana para dar comienzo al verano y son muchos los españoles que ya ultiman los detalles de sus ansiadas vacaciones. Como cada año, millones de ciudadanos optarán por disfrutar de una semana en un destino de costa con la idea de exprimir al máximo el sol y la playa. Las opciones son muy variadas debido a la gran cantidad de zonas costeras con las que cuenta nuestro territorio. Sin embargo, a la hora de elegir destino, es importante valorar algunos aspectos como, por ejemplo, la calidad de las playas.
Un año más, Ecologistas en Acción ha publicado su ya habitual informe de Banderas Negras. En esta ocasión, la organización ha entregado un total de 48 de estos distintivos a playas de nuestro país: dos por provincia y/o comunidad autónoma; una por mala gestión ambiental y otra por contaminación. Tal y como han explicado desde la organización, el informe recoge las afecciones ambientales más graves en el litoral español, "aunque no son las únicas, solo las más llamativas".
Entre todas las playas españolas que han recibido el distintivo de bandera negra hay una que ha llamado especialmente la atención, al tratarse de una de las más transitadas de la zona. Se trata, nada más y nada menos, que de la playa de Quitapellejos-Palomares, en Almería, que ha recibido bandera negra por su nivel de contaminación.
Playa de Quitapellejos, en Almería.
Esta playa se caracteriza por su amplitud y por su arena blanca y fina. Además, cuenta en la parte posterior con un bosque de pinos y eucaliptos ideal para refugiarse del calor. En total, la playa cuenta con una longitud de 1.400 metros y una anchura de 30 metros. Cuenta con servicios como algunos chiringuitos y es una de las más transitadas de la zona, sobre todo por los fanáticos de la pesca.
A pesar de que esta playa es una de las más tranquilas de la zona y de que se ha convertido en los últimos años en un refugio ideal para los que huyen de la masificación, lo cierto es que Ecologistas en Acción le ha entregado el distintivo de bandera negra por su alto nivel de contaminación.
Sin embargo, no es la única playa de Almería a la que Ecologistas en Acción ha otorgado este distintivo. La otra playa de la provincia que ha recibido una bandera negra ha sido la playa del Lancón, en Carboneras. En este caso, el motivo por el que la organización la ha incluido en la lista de playas con bandera negra es, nada más y nada menos, que su mala gestión ambiental.
El resto de playas de Andalucía que han recibido este año una bandera negra son: las playas de Granada y Poniente, la playa de Castell de Ferro (Granada), las playas de Málaga, Tarifa (Cádiz), la Costa de Trafalgar (Cádiz), El Portil (Huelva) y la ría de Huelva.
Playa de Castell de Ferro, en Granada.
Algunos de los problemas que se denuncian en el informe son las afecciones a la biodiversidad, basuras marinas, vertidos, deficiencias en los sistemas de saneamiento y depuración, o la contaminación química, lumínica y/o acústica. En esta ocasión, Ecologistas en Acción ha hecho hincapié, además, en otros problemas como los de la turistificación y la urbanización de todo el litoral, un problema que afecta especialmente a las Islas Canarias.
En el archipiélago, las islas que han recibido este distintivo han sido: las de los hoteles La Tejita y Cuna del Alma (Tenerife), el Parque Natural Dunas de Corralejo (Gran Canaria) y Playa Blanca (Gran Canaria).
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Además, otras zonas costeras como las de la Comunidad Valenciana también han recibido este distintivo por parte de Ecologistas en Acción. Es el caso, por ejemplo, de la bahía de Alicante, la playa de Amerador (Alicante), el Parque Natural de L'Albufera (Valencia), el espacio costero de la Red Natura 2000 (Valencia), el tramo litoral del Grao-Camino Serratella (Castellón) y la playa de L'Estany-Capicorb (Castellón).
Otro grave problema ambiental que sufre el litoral del Estado español, y que recoge el informe Banderas Negras 2024, es la alta concentración de plásticos. Las playas más afectadas por los pellets y a las que Ecologistas en Acción ha otorgado este año la bandera negra por este motivo han sido: la Costa Dorada (Tarragona) y las playas de Lugo, como consecuencia, según indican, de la mala gestión de la Xunta.