España se ha consolidado en los últimos años como uno de los principales destinos del mundo. Su clima y su gastronomía son uno de los grandes atractivos turísticos, que invitan a los viajeros a explorar los rincones más ocultos de la geografía española.

Esto es lo que sucede con la mejor playa fluvial de Europa, a tan solo 20 minutos de la Península. Se trata, nada más y nada menos, que de Mina de São Domingos, en la localidad de Mértola (Portugal). 

El mágico ambiente que se puede contemplar en esta zona es único en el mundo, ya que sus aguas cristalinas son la imagen más representativa de todo el municipio. Además, es una playa única que está galardonada como la mejor en la categoría de Playas Interiores en los World Travel Awards.

¿Cómo es la playa de Mina de São Domingos?

Conocida como 'Tapada Grande', la playa de Mina de São Domingos es una de las más especiales y particulares de todo el mundo. Se creó en el 2000 y fue el mayor de dos embalses de agua dulce durante el siglo XIX. 

Sus aguas cristalinas le dan un toque muy especial y acogedor, ideal para una escapada en verano de unos días en los que buscar la paz. La mejor playa fluvial de Europa está muy cerca de Paymogo, en Alentejo (Galicia) y se encuentra a tan solo dos horas en coche de Faro y, a tres, de Lisboa.

La playa de Mina de São Domingos, en Mértola (Portugal). iStock

La playa de Mina de São Domingos tiene inmensas aguas cristalinas y de tonos turquesas que son perfectas para darse un baño refrescante en los días más calurosos del verano. Eso sí, hay que tener en cuenta que la temperatura del agua oscila en 30 grados.

La tranquilidad de esta costa permite a los turistas desplegar sombrillas en la arena fina o en las zonas de césped. Los visitantes pueden relajarse leyendo en estas zonas y también pueden poner sus sombrillas. La playa también ofrece la posibilidad de alquilar piraguas y hidropedales para jugar o comer en una de sus mesas de pícnics y barbacoa.

Qué ver en Mértola

Mértola es un pueblo portugués que se encuentra atravesado por un acantilado y tiene uno de los puertos fluviales más conocidos del Mediterráneo. Nada más llegar a este lugar, lo que se puede apreciar es la tranquilidad de sus calles con unas características casas blancas.

Uno de los monumentos más emblemáticos de Mértola es su impresionante castillo, construido en la época medieval sobre fortificaciones romanas y musulmanas. A su lado, se encuentra la Iglesia Mayor, que fue construida como una mezquita en el siglo XIII con cuatro puertas de arco de herradura y un mihrab, el lugar que indica la dirección de Meca.

Aunque, si por algo se conoce a este pueblo es por su Torre del Reloj. Esta construcción data del siglo XVI y sirvió como muralla para defender la zona de los enemigos.

En el centro histórico de Mértola se encuentran las calles estrechas y callejuelas de la localidad que trasladan a los turistas a la época de la Reconquista en España.