Paradores es una cadena hotelera de titularidad pública que gestiona cerca de un centenar de establecimientos en diversas provincias de España. Desde octubre de 2015, también cuenta con una franquicia en Portugal. En 2023, la institución alcanzó un beneficio de 25 millones de euros, la cifra más alta en sus casi 100 años de existencia, y generó unos ingresos brutos de 327,8 millones de euros.
El objetivo de Paradores es potenciar la imagen del turismo español, contribuyendo a su vez a la recuperación y mantenimiento del patrimonio histórico-artístico de nuestro país. De esta forma, todos los Paradores Nacionales se encuentran ubicados en edificios que cuentan con un destacado valor histórico, artístico o cultural.
En cada rincón de España es posible encontrar uno de estos paradores, auténticos regalos para el turismo nacional. Dentro de esta larga lista de establecimientos hoteleros, se encuentran castillos o palacios ubicados en parques naturales o zonas de costa que invitan a la desconexión.
Uno de los paradores con más historia es el situado en el municipio guipuzcoano de Hondarribia. Está considerado uno de los paradores más bonitos de España, según los usuarios de Lonely Planet. En concreto, se sitúa en cuarta posición de su ránking, por detrás del Parador de Bayona, el de Granada y el de La Gomera.
Cabe destacar que Hondarribia es una de las ciudades más turísticas del País Vasco. Esta ciudad pesquera se encuentra a tan solo 20 kilómetros al este de la capital, San Sebastián, y hace frontera con Hendaya (Francia).
El castillo de Carlos V, sobre el río Bidasoa
El castillo de Carlos V acoge este parador. Se trata de una construcción del siglo X, en la que se alojaron los reyes Carlos V, Felipe IV y V, y hasta el mismísimo Diego Velázquez. Además, el Parador guarda tesoros como los tapices diseñados por Rubens con el tema de la Historia de Aquiles y objetos como armaduras, cañones y lanzas.
El Parador de Hondarribia, situado sobre el río Bidasoa, estaba destinado a la defensa militar, lo que explica el grosor de sus muros y la gran altura del edificio. Su interior combina a la perfección la elegancia en la decoración con los modernos servicios e instalaciones.
[En este impresionante palacio del siglo XIII puedes pasar la noche: es un Parador Nacional]
El palacio cuenta con preciosos salones: el salón de tapices y la sala del Emperador Carlos V. Ambos ofrecen una vista panorámica de la Plaza de Armas, lo que los convierte en un lugar perfecto para celebrar reuniones y eventos de todo tipo. El parador cuenta también con una terraza-patio y otra con magníficas vistas.
En cuanto a la oferta gastronómica, el Parador de Hondarribia ofrece un desayuno buffet. Aunque no cuenta con restaurante, en su cafetería se puede degustar una amplia oferta con productos locales como los quesos de Iparralde, las anchoas de Guetaria y una selección de bizcochos y tartas elaboradas artesanalmente en el propio parador.
Respecto a las habitaciones del parador, destacan por sus grandes vistas y por combinar la modernidad con un diseño elegante. El establecimiento hotelero ofrece un total de 36, de cinco modalidades distintas: doble estándar, doble superior, junior suite, suite e individual.
Quien decida alojarse en este magnífico parador puede aprovechar para visitar la Iglesia de Nuestra Señora del Manzano, a 100 metros del alojamiento, y la plaza de Guipúzcoa. También podrá disfrutar de un baño en la Playa de Hendaya o la de Hondarribia, situadas a dos kilómetros de distancia.