Marta Velázquez
Publicada

En las zonas rurales de la India, donde la pobreza y la falta de infraestructura de salud son una constante, la vida de los niños puede depender de un simple acceso a atención médica adecuada.

En este contexto, la Fundación Esperanza y Alegría ha decidido dar un paso al frente, con un proyecto de la mano de la Fundación Mutua Madrileña a través de la XII Convocatoria de Ayudas a Proyectos Sociales, que promete transformar la atención médica a los menores en una región crítica del estado de Kerala.

El objetivo: crear una nueva sala pediátrica en el Hospital Mundakayam Medical Trust (MMT), un centro de referencia para miles de familias que, hasta ahora, se veían obligadas a recorrer largos trayectos en condiciones precarias para recibir atención médica.

El Hospital MMT, situado en el distrito rural de Idukki y gestionado por la diócesis católica de Kanjirappally, ha sido la última esperanza para muchas familias que viven en condiciones difíciles. A pesar de ser un referente en la zona, su capacidad está limitada por la falta de infraestructura moderna, especialmente en el área pediátrica.

Una iniciativa urgente

En la actualidad, los niños que necesitan atención especializada en pediatría son derivados a otros hospitales ubicados a más de 60 kilómetros de distancia, un proceso arriesgado y muchas veces fatal debido a las malas condiciones de las carreteras.

Ante esta situación, la Fundación Mutua Madrileña ha decidido apoyar la ampliación y modernización de este hospital, con un proyecto que consistirá en la creación de una sala pediátrica equipada con ocho habitaciones y todos los servicios necesarios para tratar a los más pequeños.

Esta intervención no solo aliviará la saturación actual de pacientes, sino que también garantizará que los niños reciban una atención adecuada y oportuna sin tener que ser trasladados a otros centros.

Más que un hospital

El nuevo espacio es un lugar pensado en el bienestar completo de los niños. Además de contar con las infraestructuras necesarias para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades comunes como neumonía, desnutrición y afecciones respiratorias, la sala dispondrá de una zona de juegos y actividades recreativas.

Se busca que los niños no solo reciban atención médica, sino que también se sientan acompañados durante su recuperación. Y para los padres, que muchas veces no pueden acompañar a sus hijos debido a la distancia o las condiciones de los hospitales, se habilitarán espacios donde puedan quedarse cerca de sus pequeños. 

Este enfoque es uno de los aspectos más innovadores del proyecto. Los niños podrán disfrutar de un ambiente más amigable y menos aterrador para ellos, lo cual es fundamental en su recuperación.

La demanda supera la oferta

La situación de salud infantil en la región es alarmante. El hospital MMT ya atiende a un número significativo de niños de diversas edades, pero debido a la falta de una sala pediátrica adecuada, los equipos médicos tienen que hacer verdaderos esfuerzos para seleccionar aquellos que podrán ser admitidos en el 'espacio' que se destina actualmente a tratar las consultas de pediatría, basándose exclusivamente en un diagnóstico y una evaluación médica. La demanda supera con creces la oferta, y muchos niños no reciben la atención que necesitan a tiempo.

La edad del niño, sus necesidades físicas y sociales y las circunstancias de la familia se tienen muy en cuenta a la hora de planificar y aplicar, diagnosticar las urgencias y los tratamientos. Además, muchas niñas se ven privadas del acceso a una buena asistencia sanitaria, lo que conlleva una mayor tasa de mortalidad. A medida que las niñas entran en la adolescencia, las disparidades entre los géneros se incrementan.

Por todo esto, se ha priorizado este proyecto: no solo se beneficiarán los niños de Mundakayam y las zonas circundantes, sino que se espera que el hospital amplíe su capacidad para atender a unos 12.600 niños más de forma regular. Alrededor de 180.000 personas, entre familias y comunidades locales, también se beneficiarán indirectamente de la mejora en los servicios médicos de la zona.

Fundación Mutua Madrileña reafirma su compromiso con las comunidades más desfavorecidas de todo el mundo, en especial con las que enfrentan situaciones de emergencia o vulnerabilidad extrema.

Su objetivo es no solo paliar las necesidades inmediatas, sino también generar un impacto sostenible en el tiempo, empoderando a las comunidades para que puedan construir un futuro mejor para ellos mismos. En un mundo donde la desigualdad es una realidad, iniciativas como esta son esenciales para garantizar que cada niño, sin importar su lugar de nacimiento, tenga la oportunidad de un futuro saludable.