
Las personas divorciadas podrán acceder a la pensión de viudedad si cumplen con ciertos requisitos.
No renuncies a la pensión de viudedad: si estás divorciado, este es el requisito clave para cobrar esta ayuda
La pensión de viudedad también se extiende a divorciados y separados judicialmente que cumplan ciertos requisitos legales.
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La pensión de viudedad es una prestación económica destinada a aquellas personas que han perdido a su cónyuge o pareja de hecho.
Se trata de una ayuda que forma parte del sistema de pensiones contributivas, lo que significa que se calcula en función de las cotizaciones realizadas por el fallecido al sistema de la Seguridad Social.
Este beneficio económico tiene como objetivo proporcionar una fuente de ingresos a las personas viudas, ayudándolas a afrontar la pérdida de su pareja y a mantener su bienestar económico.

Un hombre con un cartel en el que se lee: 'Pensiones de viudedad al 100%'
En España, millones de personas se benefician de esta ayuda tras el fallecimiento de su cónyuge, pero la situación es más compleja cuando se trata de divorciados o separados, ya que la legislación varía según las circunstancias.
En este contexto, surge la pregunta de qué ocurre con los excónyuges en caso de divorcio o separación. Afortunadamente, la ley española también contempla el derecho a la pensión de viudedad para estos casos, aunque con una serie de condiciones que deben cumplirse para poder acceder a la ayuda.
Pensión de viudedad para divorciados
En cuanto a los divorciados o separados judicialmente, la legislación establece que también pueden acceder a la pensión de viudedad, siempre que se cumplan ciertos requisitos.
De acuerdo con la normativa vigente de la Seguridad Social, esta pensión no está restringida solo a los cónyuges que estaban casados en el momento del fallecimiento, sino que también se extiende a quienes estuvieron casados en el pasado.
La ley aclara que los beneficiarios de este derecho deben ser "los separados judicialmente o divorciados, siempre que en este último caso no hubieran contraído nuevo matrimonio o constituido una pareja de hecho".
Además, según la legislación, los divorciados o separados judicialmente pueden tener derecho a la pensión de viudedad si eran beneficiarios de una pensión compensatoria según el artículo 97 del Código Civil, la cual debe quedar extinguida debido al fallecimiento del excónyuge.
Otro aspecto importante que señala la normativa es que, si el divorciado tiene derecho a recibir una pensión compensatoria y el valor de la pensión de viudedad es mayor que el de la compensatoria, la pensión de viudedad se ajustará hasta igualar la cantidad de la pensión compensatoria.
Tal como se expresa en la normativa, "en el supuesto de que la cuantía de la pensión de viudedad fuera superior a la pensión compensatoria, aquella se disminuirá hasta alcanzar la cuantía de esta última". De este modo, el importe que se percibe por concepto de pensión de viudedad depende principalmente de la base reguladora, que es el promedio de las cotizaciones realizadas por el fallecido a lo largo de su vida laboral.
Excepciones que aumentan esta pensión
En términos generales, la pensión de viudedad se calcula en un 52% de dicha base reguladora, aunque existen excepciones. Por ejemplo, si el beneficiario tiene más de 65 años, el porcentaje aumenta hasta un 60%, lo que ayuda a asegurar una mayor estabilidad económica en la vejez.
Además, la ley establece otras condiciones que pueden permitir a los beneficiarios obtener una cuantía mayor de la pensión. Esto incluye casos en los que el beneficiario tiene cargas familiares, como hijos a su cargo, o cuando la situación económica del beneficiario es precaria y no le permite vivir de manera digna.
Otro factor que influye en el cálculo de la pensión es la falta de ingresos adicionales. En este sentido, quienes no reciban otras pensiones, ya sean públicas o extranjeras, o quienes no tengan ingresos derivados de actividades laborales por cuenta propia o ajena, también tienen derecho a recibir una mayor cuantía de la pensión de viudedad.
Esta medida busca garantizar que las personas en situación de vulnerabilidad económica, especialmente aquellas que dependen exclusivamente de esta ayuda, reciban una pensión adecuada.
Según datos oficiales del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, en marzo de 2025, la Seguridad Social abonó 10.313.634 pensiones en total.
De estas, aproximadamente 2,4 millones correspondieron a pensiones de viudedad, con una pensión media mensual de 932,4 euros.
Así, la pensión de viudedad extiende su cobertura a aquellos divorciados y separados judicialmente que, cumpliendo con los requisitos legales establecidos, se vean afectados por la pérdida de un excónyuge, brindándoles un apoyo económico que contribuye a su estabilidad en circunstancias difíciles.