Cantabria pierde dos de las Estrellas Michelín más preciadas en 2024
La famosa gala ha dejado a Cantabria sin dos Estrellas Michelín. Estos han sido los dos restaurantes emblemáticos de Cantabria que se han quedado sin el galardón.
29 noviembre, 2023 11:52España cuenta con algunos de los restaurantes con mayor calidad, algo que evidencian los más de 240 galardones que cuentan en nuestro país con una de las distinciones más prestigiosas del mundo de la alta cocina: la codiciada estrella Michelín. Calidad gastronómica que no falta tampoco en Cantabria, donde encontramos algunos de sus mejores restaurantes de alta cocina, pero que sin embargo no ha sido reconocida en esta gran noche de la guía Michelín. Una gala en la que dos de los restaurantes cántabros que hasta ahora habían sido premiados han perdido uno de sus reconocimientos.
[El mejor restaurante de Cantabria está en un palacio del siglo XVIII]
Un galardón que han conseguido en esta gala celebrada en Barcelona, un total de 31 establecimientos, ninguno de ellos se ha ido este año para Cantabria. De hecho, los restaurantes de alta cocina que ya poseían de ediciones anteriores sus estrellas Michelín podrán seguir conservándolas a excepción de dos de ellos.
Cantabria pierde dos de sus Estrellas Michelín más preciadas
Esta gala 2024 de la guía Michelín ha dejado a dos de los restaurantes cántabros más emblemáticos sin una de sus estrellas: El Nuevo Molino que ha perdido su estrella Michelín conseguida en 2008 y La Bicicleta que pierde la estrella verde a su cocina sostenible conseguida en 2020. Dos restaurantes únicos y con una propuesta culinaria de calidad y distintiva que seguro, seguirán estando entre los más recomendados. A continuación, te invitamos a descubrirlos:
La Bicicleta
En 2011, Cristina Cruz y Eduardo Quintana inauguraron el restaurante La Bicicleta en una encantadora casona del siglo XVIII. Con experiencia adquirida en las cocinas del restaurante Zuberoa, su visión inicial era crear un lugar acogedor donde los viajeros pudieran hacer una pausa.
La propuesta culinaria del restaurante, inspirada en la tradición gastronómica cántabra y vasca, fue reconocida con la concesión de una Estrella Michelin en el año 2017 y que lucían junto a una estrella verde por su trabajo sostenible con el medio ambiente.
[El mejor chocolate con churros artesano de Santander está en esta chocolatería desde 1962]
Una estrella verde que perderán en 2024. Aún así, la oferta gastronómica de La Bicicleta sigue destacando por combinar la calidad de la cocina regional y sostenible con un toque distintivo y único.
El Nuevo Molino
En el encantador pueblo cántabro de Puente Arce se encuentra El Nuevo Molino, un restaurante tras el que se esconde la mente maestra del chef Jose Antonio González, quien ha elevado aún más el prestigio del establecimiento al obtener dos soles en la guía Repsol y la estrella Michelín conseguida en 2008 que pierden en 2024.
Lo que alguna vez fue un molino de agua en el siglo XVIII, alimentado por el río Pas que atraviesa este pequeño pueblo, se transformó en 1970 en El Molino, un negocio familiar que se mantuvo entre los restaurantes más distinguidos de la región durante tres décadas. Tras un periodo de cierre, en febrero de 2004, el lugar fue reabierto bajo una nueva dirección, que ha triunfado con su variada carta y menús degustación.
Este hermoso restaurante destaca no solo por su idílica ubicación, sino también por su excepcional cocina, que fusiona la tradición cántabra con toques contemporáneos, centrándose en los productos que han hecho famosa a la comunidad. Mar y montaña se encuentran en una carta donde ganaderos, queseros, agricultores y pescadores de Cantabria colaboran como aliados esenciales.
[El dulce cántabro más delicioso y con más historia en España que ya existía en el siglo XIV]
Además de su propuesta culinaria, el restaurante cuenta con una destacada bodega que alberga más de 300 referencias de 11 países, una variada selección de cafés y una cuidada colección de licores, completando así la experiencia gastronómica en este lugar único.
Otros restaurantes en Cantabria con estrella Michelín
Más allá de esas dos estrellas Michelín perdidas, entre los restaurantes cantabros que seguirán manteniendo su galardón de años anteriores, además de La Bicicleta, encontramos:
Cenador de Amós
En el caso del Cenador de Amós en Villaverde de Pontones, el restaurante de Jesús Sánchez ha mantenido sus estrellas desde 1995, con reconocimientos adicionales en 2016 y 2020, incluida una estrella verde por su compromiso con la cocina sostenible en 2020.
[Este restaurante de Santander tiene la mejor tortilla de patatas (y con cebolla) de España]
esús Sánchez, el chef navarro, también abrió el restaurante Amós en el interior del hotel Villa Magna de Madrid hace un año, consolidándose como una de las mesas imprescindibles en el panorama gastronómico nacional.
Solana, Ampuero/La Bien Aparecida
Ignacio Solana lidera la cuarta generación al frente de la cocina de este restaurante familiar. Junto a su hermana Inma Solana, quien desempeña el papel de sumiller y jefa de sala, forman un equipo que fusiona la tradición con la vanguardia en la elaboración de sus menús. Ignacio, como chef, y su hermana, aportan una experiencia culinaria que combina lo clásico y lo innovador en este establecimiento familiar.
El Serbal
En el año 1999, El Serbal inició su trayectoria en el barrio de Puertochico en Santander y, recientemente, se mudó a la playa de El Sardinero. En 2003, este establecimiento culinario logró obtener su primera y única estrella, destacándose por ofrecer lo más destacado de la cocina cántabra. Sus creaciones culinarias resaltan y rinden homenaje a las raíces gastronómicas de la región, consolidando así su posición en el panorama culinario.
La Casona del Judío
La Casona del Judío ha sido una de las adiciones más recientes a este prestigioso listado, ya que Sergio Bastard obtuvo la estrella Michelin para su establecimiento en la última edición de 2022. Sergio Bastard, un talentoso chef joven con gran proyección, destaca al aprovechar productos locales y del Mar Cantábrico para plasmar su cocina personal.
Ubicado en una antigua casona indiana del siglo XIX en el Barrio de Monte de Santander, el restaurante tiene una singularidad que lo distingue. En la edición del año pasado, también recibió una estrella verde Michelin, reconociendo su compromiso sostenible con el medio ambiente.