Wine Searcher es el buscador de vinos más prestigioso del mundo. Sirve de herramienta a los más experimentados coleccionistas. Sus oficinas en Auckland controlan en tiempo real las ventas online de los mejores vinos del mundo y sus clasificaciones están basadas en el prestigio, calidad y demanda real de dichos vinos, por lo que su criterio es altamente respetado en el sector.
“Nosotros pensamos que en la vida no hay que intentarlo, hay que conseguirlo”, declara Yolanda García Viadero, de Bodegas Valduero. Y continúa: “Cuando eso es así, digamos que la suerte viene a tu encuentro. Primero a la hora de elegir el terreno, la tierra donde caímos en Ribera del Duero, el epicentro de los mejores viñedos de la zona para crear los mejores vinos. Y, luego, está el hábito de buscar la perfección. Somos perfeccionistas y eso nos acerca a la excelencia”.
Según Wine Searcher, los más prestigiosos y de más alto valor de España
El perfeccionismo que caracteriza el trabajo de Bodegas Valduero se concreta al mirar la clasificación de Wine Searcher. De entre los mencionados, el más caro y prestigioso es Valduero Lantigua 1991.
Estamos hablando, en palabras de la creadora, de “antiguas añadas, botellas muy especiales que he ido guardando en nuestro botellero durante todos estos años. Realmente es una representación de la Ribera de Duero más longeva. Cuando abres una botella de éstas, realmente estás oliendo, estás degustando el tiempo que encierra un excelente vino. Es algo muy exclusivo, algo que no hay, que no te puedes encontrar.
Tal y como lo describen en la nota de cata, estamos ante un color rojo rubí con reflejos anaranjados que indican la grandeza de un vino de 1989 que mantiene su vigor. En nariz posee notas de madera de cedro para, finalmente, dar paso a frutas maduras con un recuerdo final a cuero. En boca es intenso, complejo y se expande a medida que lo degustamos.
Hechos a mano, con emoción
En la elaboración manual (vendimia incluida) de este gran vino reside parte de su éxito, según explica Yolanda García: “Sin lugar a dudas, creo que la mente del ser humano cuando está seguida de una fuerte voluntad y, además, hay unas manos y una atención personal constante, el resultado es excelente. El hecho a mano es seguir una idea y seguir un camino de perfección y eso se hace también con la emoción, entonces, ahí justamente, en el hecho a mano, está la idea, está la emoción, está el trabajo, la artesanía y el esfuerzo”.
Lo mismo sucede con el Valduero 12 años que, además, es elegante y limpio en nariz. Este vino es “la cumbre de una idea y es que dentro de un mismo viñedo hay zonas muy particulares cada año y de esa zona tan particular, marcar los individuos, las plantas y, dentro de las plantas, los racimos y solo elaborar esos racimos (dos racimos de cada planta) y, además, el hacerlo todo manualmente. Claro, esa elección de la uva, tan pormenorizada, planta por planta, racimo por racimo, da un resultado bárbaro que roza la excelencia”, afirma desde las Bodegas Valduero.
El gusto por lo sencillo, pero bien hecho, el mimo y el cuidado de los detalles en la mayoría de las ocasiones es la clave del éxito. Valduero, al fin y al cabo, es la historia de un trío formado por Gregorio García Álvarez , Yolanda y Carolina García Viadero, la primera generación de bodegueros en la historia de sus ancestros, “tres ilusiones de tres férreas voluntades, de tres imaginaciones, que son las de mi padre junto con mi hermana Carolina y yo misma; ese buenísimo ensamblaje es lo que ha hecho posible Valduero”. Además, “cultivamos la tierra con el máximo respeto, pero es sencillamente porque en Valduero lo que queremos es el mejor vino. Y esa es nuestra prioridad”.