Un 14 sobre 14. Esa es la nota que ha obtenido Carlos Rodríguez en la Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad -más conocida como Selectividad-. Este joven alicantino ha hecho el examen perfecto: ni un solo fallo en ninguna de las pruebas. Perfecto. ¿Su sueño? Entrar en la Real Escuela Superior de Arte Dramático de Madrid y ser el protagonista de un musical en la famosa Gran Vía.
Con una nota media de 10 en Bachillerato, el joven ya ha superado la primera prueba de acceso para cursar el grado de Dramaturgia, su preferido. Carlos está sorprendido por la expectación y el interés que han suscitado sus estudios: "No pensaba que fuera a llamar tanto la atención", explica. El alumno, del IES Las Lagunas de Torrevieja, cursó el Bachillerato de Ciencias porque "se le daba bien". Pero desde hace casi quince años, dedica su tiempo libre al baile: "Comencé cuando tenía cuatro años y cuando cumplí ocho empecé a ir con mi cámara a todas partes".
Sobre la expectación que está provocando la elección de sus estudios, ha explicado en El País: "Los logros que se han conseguido con la ciencia, como mandar cohetes al espacio o curar enfermedades, tienen una repercusión necesariamente mundial", razona. "Sin embargo", continúa, "lo que hacen los artistas es encontrar una forma de expresarse que resulta bella". Y la belleza "no es algo tan práctico como la penicilina o las centrales nucleares".
El joven entiende que "los científicos que han conseguido una nota altísima y se han estado esforzando de forma sobrehumana sean quienes obtengan mayor reconocimiento social". Pero, se niega a quitarle importancia a la creación, "a alguien que te pinta un cuadro o crea un baile precioso". "Todas las ciencias y las letras son necesarias”, defiende, "pero no podemos desestimar una disciplina que se dedica a hacer de la experiencia humana algo bello, ya no solo para uno mismo, sino para todos en general".
Aun así, sus aficiones no fueron bien recibidas por el centro educativo, donde le aconsejaron que dejara sus hobbies de lado y comenzara a centrarse en sus estudios. Eran conscientes de su brillante currículo académico. Tras rodar un cortometraje sobre el acoso escolar, su profesor de música le recomendó que escribiera un musical de teatro para fin de curso. "Me encanta escribir y acepté enseguida", comenta el joven a el citado medio. Cuando el telón se alzó, la obra fue muy bien acogida por su público, que ovacionaron al autor desde el primer momento. Sintió su calor.
Cuando comenzó el Bachillerato de Ciencias lo hizo para ser "matemático o físico", pero ni él mismo pensó lo mucho que le iba a apasionar el arte. Su amor por la dramaturgia ha pesado más. En su casa, sus padres le apoyan. "Mi madre, cuando se enteró, me dijo que fuera a por todas", comenta, emocionado. En cambio, su padre, profesor de Física y Química se mostró un poco más reticente. "Le ha costado más, pero después de hablar con él ya lo ha entendido todo", explica. Animó a su hijo a estudiar Física o Matemáticas en Inglaterra y hasta fue aceptado en la Universidad de Warwick. En su centro de Torrevieja, tanto profesores como alumnos, han felicitado a Carlos por su éxito en la prueba de Selectividad.
Pero a Carlos lo que verdaderamente le llena es el Teatro. Por ello, dentro del Arte Dramático, esta es su primera opción. Le encanta "el contacto directo con el espectador": "Esa sensación de estar ensayando durante meses y que llegue el estreno y salga todo bien es increíble". Además, cuenta con experiencia dentro del mundo del cine: "Tengo más de mil folios escritos de una serie", revela.
Hasta que no descubrió su vocación en los escenarios, Carlos se limitaba a formarse a través de los libros. Su preferido, La vida es sueño, de Calderón de la Barca. Aunque últimamente también leído algún que otro libro de un musical.
Este joven alicantino tiene un don para los números, pero pese a ello, reconoce que no tiene prisa y que sin, en un futuro, descubre que estos le apasionan, estudiará Matemáticas o Fisica "a distancia". Pero, por ahora, seguirá guiándose por el corazón y está decidido a entrar Real Escuela Superior de Arte Dramático y estudiar Dramaturgia. Porque, a veces, los sueños se convierten realidad.
Los estudiantes, en pie de guerra con la Selectividad
Los estudiantes de diversas partes de la geografía española están en pie de guerra con la prueba de Selectividad. Los últimos, los alumnos de Andalucía, que han pedido que se anule su prueba de Matemáticas II. "El examen ha sido de un nivel un poco más alto que en los años anteriores, la opción B tenía algún problema en el que los cálculos eran muy largos", comentaba a ABC uno de los alumnos afectados.
Los jóvenes de la Comunidad Valenciana también se quejaron por la gran dificultad de su prueba. Todos ellos afirmaron que su examen era "el más difícil de la historia". Con este título, recogieron firmas a través de la plataforma Change.org para poder repetir el examen de Matemáticas II. "El examen de matemáticas de la modalidad de ciencias es el más importante de toda la Selectividad. Un examen así el primer día ya te anula para el resto de los exámenes", criticaba Ana, una de las firmantes.
La Ministra de Educación, Isabel Celáa, ha recibido 180.000 firmas de alumnos para pedir una Selectividad única. "Queremos luchar para que los próximos años otros estudiantes no tengan que pasar por estas desigualdades entre comunidades autónomas. Este año nos ha pasado a nosotros o a Galicia, pero otros años ha ocurrido en otras comunidades. Somos un ejemplo de por qué es necesario instaurar ya un examen único de Selectividad", comentan.