Ana es un nombre femenino de origen hebreo, cuyo significado es 'piadosa, misericordiosa, bendecida por Dios'. Hoy, en España, 250.124 mujeres celebran su santo gracias a Santa Ana, madre de María.
Una antigua tradición, que arranca del siglo II, atribuye los nombres San Joaquín y Santa Ana a los padres de la Santísima Virgen María. El culto a Santa Ana se introdujo ya en la Iglesia oriental en el siglo VI, y pasó a la occidental en el siglo X; el culto a san Joaquín es más reciente.
Todo lo que se conoce de ellos, incluso sus nombres, procede de literatura apócrifa: el Evangelio de la Natividad de María, el Evangelio apócrifo de Mateo y el Protoevangelium de Santiago. El mas antiguo de estos se remonta alrededor del 150 ad. En el Oriente el Protoevangelium gozaba de gran autoridad, algunas porciones se leían en las fiestas de la Virgen María. En el Occidente, sin embargo, fue rechazado por los Padres de la Iglesia. En el siglo XIII, partes del Protoevangelium de Santiago fue incorporado por Jacobus de Vorágine en su "Leyenda Dorada". Desde entonces la historia de Santa Ana se propagó por el Occidente hasta convertirse en una de las santas mas populares de la Iglesia latina.
En la Iglesia del Oriente ya se veneraba a Santa Ana en el siglo IV. La mejor prueba de ello es que el emperador Justino I le dedicó una iglesia. La devoción a Santa Ana se encuentra en los más antiguos documentos litúrgicos de la Iglesia griega. En el Occidente no se venera a Santa Ana, excepto quizás en el sur de Francia, hasta el siglo XIII. Su imagen, pintada en el siglo VIII en estilo Bizantino, fue mas tarde encontrada en la iglesia de Santa María Antiqua en Roma. Su fiesta, bajo la influencia de la "Leyenda Dorada", aparece en el siglo XIII donde se celebraba el 26 Julio.
Se dice que las reliquias atribuidas a Santa Ana fueron traídas de la Tierra Santa a Constantinopla en el 710. Allí estaban en la iglesia de Santa Sofía en 1333. La tradición de la Iglesia de Apt, en el sur de Francia dice que el cuerpo de Santa Ana fue llevado a Apt por San Lázaro, el amigo de Jesucristo, fue escondido por San Auspicio y vuelto a encontrar durante el reino de Carlomagno. La cabeza de Santa Ana se mantuvo en Mainz hasta el 1510, cuando fue robada y llevada a Düren, Alemania. Lamentablemente, no hay sólidos fundamentos para asegurar la autenticidad de estas reliquias.
Este y otros santos son celebrados durante el 26 de julio:
San Joaquín, padre de María
San Austindo
San Erasto de Corinto
San Jorge Preca
San Simeón de Mantua
Santa Bartolomea Capitanio
Beata Camila Gentili
Beata María Margarita y compañeras
Beato Andrés de Phû Yên
Beato Guillermo Webster
Beato Hugo de Actis
Beato Jorge Swallowell
Beato Juan Ingram
Beato Tito Brandsma