Fidel es un nombre masculino de origen latino, cuyo significado es 'fiel, digno de fe'. Hoy, en España, hombres celebran su santo gracias a San Fidel de Sigmaringen.
Este santo se llama realmente Markus Rey y nació en el año 1577 en Sigmaringa, en el suroeste de Alemania, a orillas del Danubio. Y se crió en un hogar católico instruido por aristócratas. Al pertenecer a una familia noble, estudió en la Academia Archiducal de Friburgo de Brisgovia. Hablaba francés, latín e italiano. Su firme idea de defender a los más oprimidos le motivó a conseguir el doctorado en Derecho Civil y Canónico.
En el año 1604 tuvo que emprender un viaje por Europa como preceptor de un hijo de un noble. Fue en el transcurso del mismo donde percibió la violenta e inestable situación en el que se encontraba el continente debido a la Reforma protestante.
Por ello, durante los seis años que duró el periplo, no dejó de lado nunca sus prácticas sacramentales ni sus valores cristianos. Al regresar, decidió abrir su propio despacho para defender a los más desfavorecidos, pero pronto fue consciente de la corrupción y las trampas con las que funcionaba la justicia alemana. La desilusión de su oficio le llevó a ordenarse como sacerdote dentro de la Orden de los Hermanos Capuchinos, recibiendo el nombre de Fidel.
Como presbítero, recorrió Suiza, Austria y Alemania predicando la Palabra de Dios sin desatender a los que se acercaban a él. Tal era su elocuencia que cuentan que incluso los protestantes se acercaban a escucharle. Su fama pronto adquirió relevancia y fue reclamado por el Leopoldo, archiduque de Austria, para emprender la misión de apaciguar las tensiones religiosas que hubo en Suiza tras la cruzada contra los protestantes.
Este predicador tuvo un desenlace fatal, ya que fue capturado por un grupo armado de protestantes cuando acudió como invitado a una celebración de esta escisión. Fue increpado y amenazado para que se nombrase protestante, pero ante la negativa del sacerdote, recibió el martirio con heridas en la espalda y garrotazos en la cabeza.
Este y otros santos son celebrados durante un 24 de abril:
San Alejandro de Lyon
San Antimo de Nicomedia
San Benito Menni
Santa Bova
San Deodato de Blois
Santa Dova
San Egberto
San Gregorio de Elvira
San Guillermo Firmato
Santa María de Cleofás
Santa María de Santa Eufrasia Pelletier
San Melito
Santa Salomé
San Wilfrido de York
Beata María Elisabet Hesselbald