El Sagrado Corazón de Jesús es la devoción referida al corazón de Jesucristo, como un símbolo de amor divino en la Iglesia católica. La adoración al Sagrado Corazón se originó en una corriente mística basada en la persona de Jesucristo, que describía el corazón como centro vital de expresión de su amor total y entrega.
Los escritos más antiguos respecto a esta festividad son los de santa Matilde de Hackeborn, santa Gertrudis de Helfta y santa Ángela de Foligno, y tienen origen medieval. Pero la fuente más importante de la devoción, en la forma en que la conocemos actualmente, es santa Margarita María Alacoque de la Orden de la Visitación de Santa María, a quien cuentan que Jesús se le apareció. En dichas apariciones, Jesús le aseguró que quienes oraran con devoción al Sagrado Corazón, recibirían gracias divinas.
El culto y devoción al Sagrado Corazón llegó a España a través de la orden de los jesuitas. Con la llegada de Felipe V de España, ésta se ve reafirmada por la carta que escribe a Benedicto XIII en 1727, pidiendo Misa y Oficio propio del Sagrado Corazón de Jesús, para todos sus Reinos y Dominios.
La consagración pública de España al Sagrado Corazón fue hecha primero por Carlos María de los Dolores de Borbón y Austria-Este (reclamante Carlos VII de España) y después el rey Alfonso XIII lo hará de forma oficial en Getafe, en el Cerro de los Ángeles, centro geográfico de la Península Ibérica.
Este y otros santos son celebrados durante el 28 de junio:
San Argimiro de Córdoba
San Heimerado de Hassungen
Santa Vicenta Gerosa
San Juan Southworth
Santa María Du Zhaozhi
San Pablo I papa