Pedro es un nombre masculino de raíz latina, que quiere decir 'piedra'. Por su parte, Damián es un nombre de origen griego que significa 'domador'. Actualmente, 221.987 hombres en España reciben este nombre y celebran su santo gracias a San Pedro Damián.
Son poco dignas de fe las noticias que nos comunica su biógrafo J. de Lodi sobre los rigores que empleó con él en sus primeros años uno de sus hermanos mayores. En cambio, es cierto que un segundo hermano, de nombre Damián, hizo con él las veces de padre y le procuró una buena formación en Rávena, Faenza y Parma; según parece, en agradecimiento, tomó en adelante su nombre. A los 25 años de edad era profesor en Parma y posteriormente en Rávena.
Su inclinación al retiro y a la vida ascética lo empujó muy pronto a la soledad. Ordenado sacerdote en su ciudad natal, ya en 1035 se retiró a Fonte Avellana donde, en unión con varios ermitaños, se entregó de lleno a la vida anacoreta. El resultado inmediato fueron algunos trastornos corporales, que le obligaron a mitigar los rigores iniciales, dedicándose también, desde entonces, al estudio. Elegido prior en 1043, dio una forma ordenada y definitiva a la vida de consagración de Fonte Avellana, para la que había ganado algunos grupos de ermitaños.
Era en realidad un sistema de vida monástica, mezcla de vida contemplativa, con marcado rigor de soledad y penitencias corporales, y de vida cenobítica, que unía diversos grupos bajo una misma dirección. Era algo muy semejante a lo que poco antes habían iniciado San Romualdo (m. 1027) con sus monjes camaldulenses y San Juan Gualberto (m. 1073) con los benedictinos de Valleumbrosa. Este tipo de vida, fruto inmediato de la reforma promovida por los cluniacenses, contribuyó eficazmente a preparar la gran obra de la reforma gregoriana.
Este y otros santos son celebrados durante el 21 de febrero:
San Eustacio de Antioquía
San Germán
San Roberto Southwell
Beata María Enriqueta Dominici
Beato Natal Pinot
Beato Tomás Portmort