Cirilo es un nombre masculino de origen griego, y significa'señor'. Actualmente, en España, 1.294 hombres celebran su santo gracias a San Cirilo de Alejandría.
Este santo era el sobrino del obispo Teófilo y acompañó a su tío al Sínodo de la Encina, donde fue depuesto Juan Crisóstomo. Unos años después sucedió a su tío como obispo y patriarca de la sede alejandrina.
Muchos se opusieron a su nombramiento, probablemente, por su genio impaciente y dominador. Fue notable la presión contra judíos, paganos y otras confesiones cristianas, así como por sus enfrentamientos con las autoridades imperiales.
Sus obras muestran que poseía un conocimiento extenso, además de los escritores eclesiásticos, de otros autores no cristianos de su época. Cuentan que durante un tiempo se retiró al desierto, donde recibió educación ascética por parte de los monjes. Es considerado santo por las Iglesias Católica, Ortodoxa, Copta y Luterana.
En 1882, Cirilo fue proclamado doctor de la Iglesia por el Papa León XIII, que al mismo tiempo atribuyó ese título a otro importante exponente de la patrística griega, san Cirilo de Jerusalén. Esta proclamación se basó en su firmeza al servicio de la doctrina, por lo que corrió el riesgo de ser desterrado y durante algunos meses vivió en la cárcel: "Nosotros —escribió— por la fe de Cristo estamos dispuestos a padecerlo todo: Las cadenas, la cárcel, todas las incomodidades de la vida y la misma muerte".
Este y otros santos son celebrados durante el 27 de junio:
Santo Tomás Toán
San Zoilo de Córdoba
San Sansón de Constantinopla
San Anecto de Cesarea
Santa Gudena de Cartago
San Juan de Chinon
San Arialdo de Milán