Josué es un nombre masculino de origen hebreo, que significa 'salvación'. Actualmente, hombres en España celebran su santo gracias a San Josué.
Josué fue el capitán que introdujo a su gente en la Tierra Prometida tras la muerte de Moisés. 40 años después, ya se merecían poseer la tierra que Dios prometió a los israelitas al sacarlos de Egipto. Se trata de un pueblo joven que se encuentra en las proximidades de Canán. Son los hijos de los que Yavé sacó con mano poderosa. Se han curtido en el desierto inhóspito donde han vivido del mimo de Dios y presenciando a diario sus grandezas. Tienen esculpida en su alma la idea de que sólo en la fidelidad a la alianza tienen garantía de la protección de Dios.
Josué es un varón pletórico de fe, casto, joven y fuerte, que mantiene la seguridad de que Dios vencerá a los poderosos habitantes de la tierra que se les da en posesión. Sólo Dios dará la victoria.
Jericó es la plaza fuerte que les abrirá las puertas a la conquista. Posee unas duras murallas y sus habitantes están aprestados a protegerlas. Es Dios quien habla ahora con Josué, como antes lo hiciera con Moisés, dando instrucciones para la empresa.
No se le pedirá pasividad, sino una disposición absoluta al misterio. La táctica guerrera sugerida es la más impensada y la menos descrita en las praxis de la guerra: hay que dar vueltas a la ciudad, cantando y tocando las trompetas. De esta forma, las potentes murallas de defensa caerán.
Este y otros santos son celebrados durante el 1 de septiembre:
San Egidio o Gil
San Vicente de Dax
San Victorio de Le Mans
Beato Alfonso Sebastiá Viñals
Beato Cristino Roca Huguet y compañeros
Beata Juana Soderini
San Lupo de Sens
San Prisco de Capua
San Sixto
San Terenciano de Todi
Santa Verena
San Vicente Cartaginense
Beata Juliana de Collalto
Santa Abigail Matriarca
San Arturo de Irlanda
San Constancio de Aquino
San Gil de Casaio
San Leto Cartaginense