Blas es un nombre masculino de origen latino. En España, 10.633 hombres celebran hoy su santo gracias a San Blas.

Blas de Sebaste poseía un don de curación milagrosa. Según la tradición, esta habilidad la aplicaba tanto a personas como a animales. Una de las historias era que un niño se estaba ahogando debido a que se le clavó en la garganta una espina de pescado. Blas consiguió salvarle y, desde entonces, se acuñó la costumbre de bendecir las gargantas el día de su fiesta, el 3 de febrero.

Durante su tiempo de oración, nadie le molestaba. Sin embargo, cuando no estaba en estas labores, incluso los animales enfermos se le acercaban para que los curase.

Fue este motivo el que hizo que lo apresaran. Cuando llegó a Sebaste la persecución de Agrícola (gobernador de Capadocia) contra los cristianos (la última persecución romana), sus cazadores fueron a buscar animales para los juegos de la arena en el bosque de Argeus y encontraron muchos de ellos esperando fuera de la cueva de san Blas. Allí encontraron a Blas en oración y lo detuvieron.

En la prisión, Blas sanó a algunos prisioneros.  Agrícola trató sin éxito de hacerle renegar a su fe y mandó a matarlo arrojándole a un lago. Pero Blas, de pie sobre la superficie (como el milagro atribuido también a Jesucristo), invitó a sus perseguidores a caminar sobre las aguas y así demostrar el poder de sus dioses. Al final, todos acabaron ahogándose.

Cuando volvió a tierra (por orden de un ángel) fue torturado (colgado de un poste y lacerado con rastrillos de cardar) y finalmente decapitado.

Según el Diccionario de los Santos, las Actas de este mártir carecen de consistencia histórica, pero fueron muy populares a partir del alto medievo, tanto en Oriente como en Occidente. Hasta este lugar llegaron a través de diversas traducciones latinas de un texto griego. Su culto se extendió pronto por toda la iglesia. Es costumbre popular invocarle particularmente para remediar afecciones de la garganta.

Este y otros santos son celebrados durante el 3 de febrero:

San Leonio de Poitiers

San Celerino de Cartago

Santa María de San Ignacio Thévenet

San Lupicino de Lyon

San Adelino de Celle

San Oscar de Brema

Santa Berlinda de Meerbeke

Santo Profeta Azarías

San Tigrido

Santa Olivia mártir

Santa Wereburga de Chester