Bienvenido es un nombre masculino que procede del latín, cuyo significado es 'bien recibido'. Este santo nació en el año 1188, en Ancona, una región en el centro de Italia. Hoy, en España, celebran su santo 4.167 hombres gracias a San Bienvenido Scotivoli.
Bienvenido se trasladó a Bolonia y allí estudió Derecho bajo la tutela de otro santo, San Silvestre Guzzolini, canónigo de Ósimo. Un tiempo después, fue nombrado capellán y más tarde arcediano de Ancona. Su fe y sus acciones le llevaron tiempo después, a ser nombrado Obispo de la diócesis de Ósimo.
En el año 1267, el papa Clemente IV le concedió el gobierno de la Marca de Ancona. Y, bajo su mandato, prohibió al monasterio de San Florencio de Pescivalle enajenar sus bienes. Del mismo modo, también prohibió la venta de todas las propiedades eclesiásticas y emprendió importantes reformas en su catedral, todo ello, sin dejar en ningún momento de defender los derechos de su diócesis sobre la ciudad de Cingoli.
Bienvenido era devoto de la Orden Franciscana y se le recuerda como una persona afable y paciente, pero también constante y reformador. Por ello, es el patrón de la ciudad de Ósimo desde el año 1755.
Este y otros santos son celebrados durante un 22 de marzo:
San Basilio de Ancira
San Nicolás Owen
San Epafrodito
Santa Lea de Roma
San Pablo de Narbona
Beato Francisco Chartier