Uno de los cinco acusados por la presunta violación de San Fermín quiere que la joven madrileña que denunció la agresión sexual sea examinada por un psiquiatra. Así se lo ha solicitado al juez a través de un recurso en el que se opone al auto del titular del Juzgado de Instrucción número 4 en el que dio por concluida la investigación de los hechos ocurridos en la madrugada del 7 de julio. Solicita además que la joven vuelva a declarar para que sea interrogada.
Se trata de Jesús Escudero, ‘Escu’, uno de los cinco miembros de la ‘manada’ -como ellos mismos se denominan-, que se vio afectado por la renuncia de su primera abogada. Ahora, su nuevo letrado ha solicitado al juez que reabra la investigación y practique nuevas pruebas como ese reconocimiento de la joven por un médico psiquiatra seleccionado por el acusado a efectos de elaborar un informe pericial. También pide un reconocimiento de la denunciante por parte de un catedrático de medicina legal.
Cientos de folios
Antes, la defensa de ‘Escu’ solicita poder ver los vídeos que grabó el grupo de sevillanos sobre los hechos ocurridos en el portal de la calle Paulino Caballero de Pamplona. “Los letrados necesitamos un mínimo de tiempo para poder estudiar los cientos de folios que ocupan las actuaciones, visionar los vídeos que se ha negado el Juzgado a entregar mediante copia a las partes y finalmente decidir qué diligencias de prueba se propondrían en la fase de instrucción”, sostiene el recurso presentado ante el juez al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL.
El abogado de ‘Escu’ denuncia la “absoluta indefensión” en la que se encuentra su cliente y dice no entender “las prisas” del juez por cerrar la investigación. “Si no se les permite una defensa digna y propia de un Estado de Derecho, este procedimiento se parecerá mucho a un procedimiento inquisitorial”, critica.
Testimonio consistente
La joven ya fue examinada por varias peritos psicológicas designadas por el juez y concluyeron que la versión de la chica era consistente y descartaron que se hubiese inventado la agresión. El examen, que se practicó en los Juzgados de Tudela y no en Pamplona para preservar la intimidad de la joven, concluyó que la presunta agresión le dejó un estado de trastorno postraumático a la víctima.
El juez que investiga la presunta violación emitió en septiembre un auto en el que acordaba mantener en prisión a los cinco sevillanos detenidos y rechazaba por completo la versión de los acusados. Negó que la chica mostrase consentimiento alguno en el acto sexual y detalló que el grupo la llegó a agarrar del pelo para obligarla y manejaron forzosamente su cuerpo mientras ella mantenía una actitud pasiva con los ojos cerrados.