Una mujer de 39 años ha denunciado ante la Ertzaintza una presunta agresión sexual por sumisión química, cree que le pudieron echar algo en la bebida, durante la celebración del concierto de Guns N' Roses, según confirmó el jueves un portavoz del Departamento de Seguridad y recoge este viernes El Correo.
La mujer decidió bajar a la pista a "tomar algo" cuando el grupo comenzó a tomar las primeras canciones, según lo que ha contado a la Policía, y después de la primera cerveza dijo a los agentes "no recordar nada".
Más tarde, en el baño de un bar cerca de San Mamés, recuperó la consciencia. Un hombre trataba de quitarle la ropa mientras se resistía.
La víctima cree que este individuo podría haber utilizado alguna sustancia que alteró sus facultades, dejándola en un estado seminconsciente. La mujer también perdió o le sustrajeron el teléfono móvil que portaba.