El propietario de una joyería de de Carmona, localidad sevillana situada a unos 30 kilómetros de la capital hispalense, ha sido encontrado muerto y amordazado en la tarde del lunes, en circunstancias que investiga la Guardia Civil.
Las primeras llamadas de la mujer, tanto a su teléfono móvil como al fijo de la joyería, las realizó a las seis de la tarde, y poco después de las ocho, asustada ante la imposibilidad de contactar con él, una hija del joyero accedió al establecimiento y encontró a su padre muerto en la trastienda y amordazado.
El alcalde de Carmona, Juan Ávila, ha confirmado el suceso, y ha destacado la consternación en la localidad ante la muerte violenta de un empresario muy conocido, en un suceso del que todavía se desconocen los detalles.
El fallecido, de 60 años de edad, tenía al menos un impacto de bala.
Por ahora no se ha hablado de una hipótesis concreta pero medios locales apuntan a un robo como el principal motivo de su asesinato. Vecinos de la zona han informado a los agentes de que en torno a las seis de la tarde vieron a las puertas de la joyería un coche de color azul en el que iban tres hombres, cuya descripción han aportado.
El conocido joyero había trabajado para varias cofradías de la zona y era el relojero oficial de la iglesia de Santa María.