El caso de Calcetitas rojas ha sido cerrado por un juez en México. La niña de 4 años que fue violada y golpeada hasta la muerte por sus padres después de que la menor se hiciera pipí en la cama. Los homicidas han sido condenados a 88 años de cárcel y el magistrado ha ordenado post mortem la inscripción de la niña en el Registro Civil, pues no tenía nombre ni acta de nacimiento.
Los hechos ocurrieron el 18 de marzo de 2017 en el municipio mexicano de Nezahualcóyotl, en el centro del país, según informa el diario mexicano El Universal. La pequeña orinó en la cama, lo que causó la ira de su madre, Yadira Medica, y su padrastro, Pablo Rodríguez, quienes maltrataban a la niña con frecuencia. Primero, la madre comenzó a pegar a la menor. Después, el hombre la violó y la siguió azotando. La cogió de las piernas y la estampó contra el suelo, provocándole las heridas que le causaron la muerte.
Tras matarla, los padres buscaron la manera de deshacerse del cuerpo. Lo envolvieron en una manta y lo llevaron a otra zona del municipio, una comunidad conocida como El Sol, donde lo abandonaron. Fue un vecino de esa localidad quien posteriormente encontró el cadáver, que estaba vestido con un chándal verde y unas calcetas rojas.
Así, durante la investigación el caso fue conocido como el de la niña de las calcetitas rojas. Tras varios días sin que nadie reclamara e identificara el cuerpo, éste fue finalmente sepultado en un cementerio bajo el nombre de Guadalupe Medina Pichardo. Además, los tres hermanos de la niña serán becados para que puedan seguir sus estudios.