La Audiencia de Bizkaia ha condenado a prisión permanente revisable a la mujer que mató a su hija de 9 años al intoxicarla con fármacos y asfixiarla en la vivienda familiar del barrio de Atxuri, en Bilbao, según han informado este viernes fuentes judiciales. El pasado mes de septiembre, Ana Julia Quezada fue la primera mujer en ser condenada a prisión permanente revisable en nuestro país.
Un jurado popular declaró el pasado 19 de diciembre a la acusada culpable de asesinato con alevosía con las agravantes que supone el parentesco y que la víctima fuera menor de 16 años. Los hechos ocurrieron el 16 de enero pasado cuando la hermana de la víctima, de 20 años, llegó a la casa y encontró inconscientes y abrazadas a su madre y a la niña. Tras alertar a Emergencias, los sanitarios pudieron reanimar a la mujer pero la menor falleció.
De los resultados expuestos durante el juicio, se desprendió que tanto la madre como la hija presentaban una combinación de fármacos, entre ellos ansiolíticos, cuya concentración superaba "los grados de toxicidad" y en el caso de la niña "el nivel letal". La causa de la muerte fue, precisamente, ese cóctel de medicamentos, "quizás" ayudado con "mecanismos de asfixia", según estableció la autopsia e informaron fuentes personadas en el caso. También se determinó que la niña había ingerido o se le había suministrado fármacos con anterioridad.
El 30 de septiembre, Ana Julia Quezada fue condenada a prisión permanente revisable por el asesinato de Gabriel Cruz. Así, la asesina se convirtió en la primera mujer en España a la que se le imponía este tipo de condena. Desde 2015, cuando se reformó el Código Penal, los jueces habían impuesto dicha pena en diez de los 17 casos en los que alguna de las partes lo solicitó previamente para el acusado. La jueza condenó a Quezada por un delito de asesinato con la circunstancia agravante de parentesco.