Fatal desenlace de la búsqueda de María Esther López González, la mujer de 55 años desaparecida desde el pasado viernes en Gijón. Su cuerpo sin vida ha sido hallado a última hora de este domingo en el domicilio de unos allegados en el que trabajaba como asistenta de limpieza en algunas ocasiones, según informa la Policía Nacional.
La vecina de la localidad asturiana salió de su domicilio este pasado viernes por la mañana. Las alarmas se dispararon cuando por la noche del mismo viernes no había respondido a mensajes de familiares. El sábado se confirmó que algo realmente había ocurrido ya que no respondía ni a llamadas ni a mensajes. En ese momento los hijos de María Esther avisaron a más familiares y amigos que viven en Gijón para que acudiesen a su domicilio para comprobar si se encontraba allí. Rápidamente sus hijos viajaron a Gijón e interpusieron una denuncia de desaparición en la Comisaría.
Uno de sus hijos, que vive en Madrid y se desplazó a la provincia de Asturias, afirmaba que cuando llegó al domicilio de la mujer la puerta estaba cerrada con dos vueltas de llave, como normalmente hacía ella, el dinero estaba en su sitio y el secador y otros enseres estaban de haberse peinado.
Sus familiares y allegados preocupados habían pedido colaboración ciudadana para encontrar a María Esther. Insistían en que salió de su domicilio a mediodía del viernes y lo que se conocía de sus últimos movimientos apuntaban a que los hechos sucedieron tras hablar por teléfono con una de sus hijas, residente en Mallorca.
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Según afirma la Policía Nacional, los propietarios del domicilio no estaban presentes y se encontraron el cuerpo sin vida de María Esther a su regreso después de pasar todo el fin de semana fuera. La Policía Nacional ha abierto una investigación de los hechos. Pero todo apunta a que la muerte de la mujer se trataría de un accidente doméstico.