Los ataques de tiburones son cada vez más frecuentes. Según el Archivo Internacional de Ataques de Tiburones (ISAF) de la Universidad de Florida, en 2023 se elevaron hasta 69 el número de ataques, frente a los 63 que había de media en los últimos cinco años. No obstante, preocupa especialmente el aumento de muertes, que el año pasado se elevó a diez, frente a una media de cinco los últimos años. 

En este sentido, este jueves, 4 de julio, un nuevo ataque de tiburón volvió a despertar las alarmas. El suceso tuvo lugar en Estados Unidos, en concreto, en la Isla del Padre Sur, situada en la costa sur del estado de Texas. Al menos cuatro personas resultaron heridas en una pierna por un ataque de este animal, dos leves y dos de carácter más grave.

El incidente ocurrió cerca de las 11:00 de la mañana en la playa de la isla, en plenos festejos por el Día de la Independencia de EEUU. Según informó el Departamento de Bomberos de la Isla del Padre, uno de los heridos fue un hombre, quien sufrió una herida grave en una pierna, provocada por la mordida del tiburón, por la que fue trasladado a un hospital.

"No es muy común que haya tiburones, en casos anteriores reportaron avistamientos, el año pasado eran bebés. Este momento es histórico porque fueron 2 ataques directos", advirtió la capitana del Departamento de Parques y Vida Silvestre de Texas.

Tras los ataques, las autoridades de la Isla del Padre recomendaron a los visitantes no entrar al agua durante dos horas. Ahora, han puesto en marcha un operativo de vigilancia de la zona con drones, de cara a prevenir futuros ataques. 

Las medidas de seguridad para garantizar la seguridad de los bañistas se han intensificado también en México. Y es que el pasado 30 de junio se produjo un ataque, en este caso, de cocodrilo. El suceso tuvo lugar en la playa Miramar de Ciudad Madero, que tuvo que cerrar por la presencia de al menos tres cocodrilos en el mar.

Sin embargo, las autoridades confirmaron que se trataba solo de un ejemplar que nadaba en la playa y no de tres, como se mencionó en un principio. El cocodrilo, de 2 metros de longitud, fue capturado y reubicado en una zona más segura.

Las zonas de España con más riesgo de que aparezcan tiburones

En España, la presencia de tiburones no es habitual. Sin embargo, durante los últimos años su presencia ha aumentado a causa del cambio climático, ya que el aumento de la temperatura del mar hace que los animales acuáticos se muevan hacia el norte en busca de lugares más frescos. 

De hecho, el pasado sábado 15 de junio, un tiburón de dos metros de longitud se acercó a la orilla de la playa de Melenara, en el municipio de Telde (Gran Canaria). El avistamiento de este animal provocó el pánico entre la población y, de manera inmediata y a modo de prevención, el Ayuntamiento decidió prohibir el baño en esta cala.

Por fortuna, el tiburón no atacó a ningún bañista. Y es que, desde 1847 hasta la actualidad, solo hay constatados dos ataques de tiburón en aguas españolas. Sin embargo, es importante tener precaución, ya que existen algunas zonas donde hay más posibilidades de que los bañistas se encuentren con este tipo de especies.

En España, Galicia encabeza el ranking debido a la baja temperatura del agua y su situación geográfica. En concreto, se producen casos de avistamientos en lugares como la Ría de Vigo, donde se han visto ejemplares que superaban los 10 metros de longitud y los 100 kilos de peso. 

Otras ciudades del Mar Cantábrico, como San Sebastián, también han avistado tiburones en sus playas. Sin embargo, también hay zonas del Mediterráneo con presencia de estos animales. Es el caso de las playas de Granada, uno de los lugares donde aparecen más especies. La tranquilidad de las playas durante la época de la pandemia provocó que una gran cantidad llegaran a las playas de la Mamola y Calahonda, entre otras muchas.

Pero Granada no es la única zona del Mediterráneo donde se han avistado tiburones en los últimos tiempos. En el litoral valenciano se han visto Alboraia, en la playa de la Patacona, en la playa de las Arenas y en aguas de Tabarca, en Alicante. Incluso un hombre fue mordido por una tintorera en la playa de Aigua Blanca, en Oliva.