Tardó en salir el primer toro unos cuantos minutos después de finalizar el paseíllo porque no se cabía en la plaza de toros de Albacete. Avanzadas las seis de la tarde aún entraba gente, un chorro incesante de afición. Ambientazo, sol y expectación. Hasta arriba los tendidos. Compartían cartel Juli y Talavante con Ventura, en una de esas mezclas tan habituales. El festejo mixto de las figuras, un mano a mano camuflado.

El primer toro para la lidia a pie de Garcigrande acumulaba todo el trapío en 507 kilos. Redondo y musculoso, astifino y con morrillo. Las rachas de viento elevaban la falda del capote de Juli. El primer puyazo fue bajo. No hubo segundo: decidió quitar. La revolera voló a cámara lenta.

Con la muleta Juli encontró una zanja. El toro humillaba sin fuerza. La muleta retrasada no ayudó a afianzar el viaje. Le faltaba un tranco, reponía en los tobillos y esperó en alguna ocasión. Soltaba también un tornillazo. Juli obligó sin resultados. Se mantenía por dentro el bicho. La brújula buscaba el norte, el fondo no aparecía. Al natural tan poderosa la muleta tampoco arrancó un tranco más. A 'Guitarra' lo guiaba el instinto. No había nada que hacer. Medio espadazo fue suficiente.

Talavante reaparecía de una lesión en la mano este jueves en Albacete. 'Espadachín', el tercero, era castaño, ojo de perdiz. Otras hechuras. La expresión más amable. No se dejó torear con el capote, huido en el trote constante, sin detenerse. Tampoco le gustó el caballo. Tuvo que entrar dos veces. Agarró las gaoneras en la media distancia. Hasta tres ligadas immobile el matador. Cerró con una larga encendida.

Talavante se fue a los medios. Desde allí el cartucho de pescao. La faena tuvo toda calma de ese instante. Desplegó la muleta como si nada y engarzó un natural largo a pies juntos, sin estridencias, chocante de ritmo y elasticidad. Pero qué cosa. La tanda que lo siguió fue cumbre, sin más. Los derechazos también. Tan despacio y limpios. La primera serie por ese lado tuvo más desgarro coronada con un lento pase de pecho. A la siguiente emergió una arrucina. Qué insolencia para salir de la cara, como si no hubiera hecho nada. 'Espadachín' humillaba, con la fuerza justa. Talavante sumaba muletazos buenos a puñados. Miró al público en las manoletinas. Sublime el último pase de pecho. Además, todo como a punta de gas. Talavante alcanzó las dos orejas toreando muy bien con un esfuerzo muy concreto, sin arrebatos. Lo cuajó sin rodeos. Qué torero.

Talavante da un pase con la muleta a uno de los de su lote. Efe

El quinto también tuvo seriedad, negro como la noche, ofensivo, enseñando las puntas. No era, digamos, fino. Amplio desde el colgajo de la badana. Dos medias genuflexas en la segunda raya del tercio. El inicio de faena igual, dando sitio y empujando por doblones. Hizo todo a favor del toro, milímetro a milímetro, con suavidad y sin exigirte. Cuando tomó la muleta al natural era otro. Se desplazaba más el toro. Al menos una chispa de alegría. Juli lo llevó redondeando los muletazos. Siempre hacia delante. Lo tapó mucho de nuevo por la derecha, descarado con él. Se impuso a él con los toques y el trazo firme, exprimido con la izquierda. Del trincherazo al cambiado por la espalda. Tres circulares en los medios, unos cuantos molinetes y a por la espada. Se había montado Juli encima. El acero cayó algo trasero. El trofeo tenía fuerza: las dos orejas quedaron livianas, exageradas. El presidente lo empató con Talavante.

Menos basto pero en esa línea del anterior era el sexto. Despegado del suelo, montado y con el pitón blanco. Salió suelto de todos los capotes y se estrelló en el peto. Volvió al percherón desde el capote del subalterno que sustituye al lesionado Trujillo. Alejó al toro Juli. Talavante lo sacó del tercio con doblones. Ya translucía el toro su vacío. Muy parado al natural. Quedo en el final de los derechazos. Seco. Talavante se puso por las dos manos medio justificándose. Lo que se había guardado el toro, lo sacó cuando se enfrentaba al descabello; un arreón malicioso buscó al matador elevada la muleta. Al fin encontró AT la arruga.

Hasta la puerta de chiqueros se fue Ventura con el cuarto, El extremeño cuajó a buen toro de Garcigrande al que desorejó toreando fenomenal con las dos manos sin estridencias, con suavidad. El presidente regaló una oreja a Juli, que también salió a hombros, y negó otra a Ventura., a menos. No tenía garrocha. Clavó sin embargo el rejón de castigo de salida. Después hizo virguerías con 'Sueño', el caballo con el que se convierte en centauro. Dio una vuelta al ruedo completa galopando a dos pistas. La cola de 'Sueño' llevaba prendido al toro, soltando los derrotes, acompasando el tranco murubeño. Recortó para dentro y cuadraba en la cara. Metido en la tronera pasó cuatro veces seguidas por los pasillos interiores. El toro no sabía ni por dónde venía. Un par andando para atrás y quebrando en el embroque fue el colofón. Dejó el triunfo encarrilado al flexible 'Chalana', que toreaba con el cuello, cimbreado desde la barriga, y al espectacular albino, con el que remató con las cortas y mató a la primera. Hubo una petición total de dos, la faena lo era, pero el palco prefirió dar una con criterio en los pies. Luego lo de Juli, que ya está contado, lo confirmaría. El rejoneador dio dos vueltas al ruedo.

Arreó el primero toro a la cabalgadura de Ventura. El sevillano se decidió por dos rejones de castigo. Después Nazarí formó un lío en los primeros pares de banderillas. Ventura lanzó el sombrero a la salida del primero. Galopaba el toro enganchado al estribo, como de salida. Lo redujo Ventura acomodándolo en la barriga del caballo. 'Roneo' y 'Remate' alcanzaron el toro sin esa velocidad, otra intensidad. Mató a la segunda, apagado ya todo.

SÁNCHEZ Y SÁNCHEZ/ DOMINGO HERNÁNDEZ

Diego Ventura, El Juli y Alejandro Talavante.

Plaza de toros de Albacete. Jueves, 15 de septiembre de 2016. Octava de feria. Lleno. Toros de rejones de Ángel Sánchez y Sánchez, 1º embistió a arreones, con ritmo el 4º, y cuatro de Garcigrande, 2º complicado, bueno sin fondo el 3º, de mejor pitón izquierdo el buey 5º, 6º sin celo y de contado poder.

Diego Ventura, pinchazo y rejonazo. En el cuarto, rejonazo. Un descabello (oreja y dos vueltas al ruedo).

El Juli, de verde botella y oro. Medio espadazo (silencio). En el quinto, estocada casi entera algo trasera (dos orejas).

Alejandro Talavante, de verde hoja y oro. Estocada trasera (dos orejas). En el sexto, pinchazo, pinchazo hondo que escupió, estocada atravesada y suelta. Varios descabellos (silencio).