El matador de toros Iván Fandiño, de 36 años, ha muerto. Lo ha matado Provechito, un toro de Baltasar Ibán en Francia, en la plaza de toros de Aire Sur L'Adour, según ha podido confirmar este diario.
La cornada, de 15 centímetros afectó a órganos vitales, indicaron a Efe fuentes oficiales. El periodista francés André Viard, que presenció la tragedia, ha explicado a EL ESPAÑOL que "era mortal de necesidad". Murió en el traslado en ambulancia a Mont de Marsan.
El alcalde de Aire-sur-l'Adour, Xavier Lagrave, afirmó a Efe que el matador fue asistido de forma inmediata en la enfermería de la plaza por el doctor Jean-Claude Darracq, que certificó que sufría una cornada de 15 centímetros que afectaba a un riñón y al pulmón.
"Parecía grave en un primer momento pero el matador entró con vida en la enfermería de la plaza de toros. Hacía gestos de dolor", señala Viard.
"Me estoy muriendo"
Cuando era llevado en volandas hacia la enfermería, Fandiño fue consciente de la gravedad de la herida. "Que se den prisa en llevarme al hospital porque me estoy muriendo", dijo al matador francés Thomas Dufau compañero esta tarde junto a Juan del Álamo, según recoge el diario francés Sud-Oest. Serían sus últimas palabras.
El toro, el tercero de la tarde, lo corneó cuando hacía un quite por chicuelinas. Un empujón lo derribó. Y en el suelo el toro hizo presa. "Se vio perfectamente la cornada. Con muy mala suerte, porque el toro lo empujó, él trastabilló y ocurrió. Lo cogió contra el suelo". El pitón se enterró en el costado derecho.
"La cornada fue muy parecida a la de Víctor Barrio, pero ahí si nos enteramos de lo que sucedió. Estuve aquel día en la plaza también", indica Viard. El matador de Orduña entró en la enfermería vivo. Desde allí lo trasladaron al hospital de Mont de Marsan, que está "a 30 o 40 kilómetros" del lugar donde se produjo el trágico percance. "La enfermería de Aire no es muy grande", cuenta un matador que prefiere no dar su nombre.
"Tenemos que homenajear su memoria"
"Somos una ciudad taurina y queremos que esta tradición se perpetúe, tenemos que buscar la forma de homenajear su memoria", ha dicho el alcalde de la ciudad, Xavier Lagrave.
La fiesta continuaba por la noche en la localidad, situada a 64 kilómetros al norte de Pau "porque mucha gente todavía no sabe lo que ha sucedido", señaló Lagrave.
Fandiño había cortado una oreja en su primero en una faena muy aplaudida por una plaza que mostraba tres cuartos de entrada.