Una semana después, sigue sin haber noticias de Manuela Barbosa, la mujer de 66 años que desapareció en Arcade. La última vez que la vieron fue por la zona del Restaurante Avenida de la parroquia de Soutomaior.
Ante la ausencia de cualquier rastro y la desesperación, la familia de la desaparecida quiere que se rastree el móvil para tratar de localizarla, pero la ley no lo permite, salvo que se trate de una persona incapacitada o si se está investigando algún delito. También destacan que tenía problemas de movilidad y descartan que se trate de una desaparición voluntaria.
En señal de protesta, la familia ha anunciado que se concentrará mañana a las doce del mediodía delante del puesto de la Guardia Civil de Arcade.
Manuela Barbosa es de complexión delgada, con el pelo rubio y los ojos negros, en el momento de desaparecer llevaba un vestido beige con flores y círculos, sandalias del mismo color y un bolso de paja.