La plataforma SOS Desaparecidos ha denunciado a un hombre nacido en Sevilla domiciliado en Vigo que responde a las iniciales J.M.Z.G por usurpar la identidad de su presidente, Joaquín Amills, y su coordinador nacional, Francisco Jiménez, además de estafa, falsedad documental, coacciones y pedofilia.
La relación del acusado con la plataforma que se dedica a localizar a personas en paradero desconocido comenzó en 2019, cuando se puso en contacto con ellos para comunicarles la desaparición de su padre, a pesar de que, asegura Joaquín Amills a Treintayseis, no coincidían los apellidos de ambos. "Dos días después, la policía nos notificó que lo habían localizado, así que desactivamos la alerta. Pero dos meses después, este hombre se puso de nuevo en contacto con nosotros diciendo que habían localizado a su padre fallecido" y les pidió ayuda económica para hacer frente a los costes del entierro.
"Le dijimos que no podíamos ayudarlo y que esa no era nuestra forma de proceder", asegura Amills, además de que "su supuesto padre era de Almendralejo, él era nacido en Sevilla pero domiciliado en Vigo y quería enterrarlo en Caravaca de la Cruz". Casualmente, en ese municipio murciano es donde SOS Desaparecidos tiene su domicilio fiscal.
"Somos una entidad con presupuesto cero, no entendemos que intente estafarnos porque no recibimos dinero de nadie. Es curioso, también, que la persona que decía que era su padre y que dijo que había fallecido sigue viva", cuenta Amills.
Ataque en webs y suplantación de identidad
A partir de ahí, comenzó la pesadilla. "Comenzó a realizar publicaciones en webs como Milanuncios donde desprestigiaba a la entidad y a los coordinadores" en un ataque que define como "cobarde y mezquino". "A dos de las coordinadoras las llamaba a altas horas de la madrugada insultándolas, hasta el punto de que tenían miedo a salir a la calle", añade. La primera denuncia la interpusieron el 27 de diciembre de 2019 en Almería.
Posteriormente, comenzó a usurpar las identidades del coordinador nacional a través de su teléfono, "mandando a sus contactos mensajes con fotografías de un hombre desnudo" y a través de la cuenta de Facebook del presidente. "Nuestros teléfonos están abiertos 24 horas y atendíamos mensajes y llamadas a las dos de la mañana de personas a los que les había pasado nuestro contacto".
En esas llamadas, se les pedían fotografías de índole sexual de menores de edad. "Nos enteramos de que a través de nuestros números de teléfono pedía fotos de niñas menores, entre 11 y 4 años", explica Amills, que solicitó a uno de esos interlocutores las capturas de imagen de los mensajes en los que estaba mandando. "Hemos ampliado la denuncia en cuatro ocasiones", puntualiza, según iban conociendo más datos.
"Un acoso constante"
Según denuncian, se abrió un perfil en Instagram con la imagen del coordinador nacional, Francisco Jiménez, en cuya descripción aparece la dirección web de SOS Desaparecidos y que usaba en grupos de pederastas haciéndose pasar por él. "Fran ha tenido que cambiar tres veces de número de teléfono porque era un acoso constante", unos teléfonos que "no son corporativos", sino los suyos personales.
Este viernes prestaron declaración en Caravaca de la Cruz; el denunciado acudió hace cerca de un mes y medio, pero "no quiso declarar". Este martes, desde la plataforma han aportado la parte documental sobre los asuntos de pedofilia.
"Hemos llevado el asunto confiando en la justicia, sin querer darle publicidad, pero con los últimos acontecimientos hemos decidido sacarlo a la luz porque Vigo y Pontevedra tienen que conocer que tienen a un pedófilo suelto", concluye.