El juzgado de instrucción número 2 de Tui (Pontevedra), que investiga la muerte de Déborah Fernández Cervera, ha acordado en un auto la práctica de nuevas pruebas solicitadas por los letrados de la familia de la joven y ha accedido a que se tomen nuevas muestras de ADN y al cotejo de otras muestras ya extraídas.

Así, el juzgado ha accedido a la práctica de diligencias solicitadas en "uno de los numerosos escritos de los letrados de la familia", en el que se solicitaba el cotejo de las muestras de ADN ya extraídas a diferentes personas a lo largo de la investigación "con el ADN del pelo hallado junto al cuerpo de Déborah, de la cuerda que había debajo del mismo y de muestras de ADN que se hayan obtenido tras la exhumación".

Por otra parte, el juzgado también ha accedido a la toma de muestras de ADN de otras personas a las que, hasta el momento, no se les había pedido. Por este motivo, la Policía ha solicitado la colaboración a decenas de personas, previo consentimiento informado y documentado.

Informe pericial

Junto a este escrito, además, fue presentado un informe pericial de los criminólogos Carmen Balfagón y Ramón Chippirrás, en el que se solicita que se autorice al Instituto de Ciencias Forenses de la Facultad de Medicina de la Universidad de Santiago de Compostela el estudio del fenotipado forense con las muestras de ADN del pelo y la cuerda hallados junto al cadáver de la joven, así como del posible ADN obtenido tras la exhumación del cuerpo.

"La obtención del fenotipado forense permitiría conocer sexo, color ojos y piel, origen geográfico, edad, cabello rizado o liso". Los letrados de la familia coinciden en que esto "tampoco resulta una prueba concluyente, pero sí permitiría descartar y dar una mayor información sobre el dueño del ADN encontrado".

Del mismo modo, el juzgado ha accedido a investigar diferentes vehículos que habrían sido vistos en la zona de desaparición de Déborah y que fueron identificados, aunque no se hizo un seguimiento de estas pistas.