La Policía Local de Poio tuvo que intervenir este martes para sacar un vehíuclo que se había quedado atascado en el casco vello de Combarro, en un lugar de difícil acceso por la estrechez de la calle.
En el coche de alquiler y matrícula portuguesa iban dos turistas alemanas que no conocían la zona y que visitaban Combarro; para ello, se guiaban por las indicaciones del GPS, que las llevó por zonas muy estrechas, un camino que continuaron a pesar de las señales de prohibición hasta la iglesia de San Roque, donde quedaron finalmente atrapadas, entre las rúas de San Roque y A Rúa, en "un límite donde por la calle solo entran dos personas", según fuentes de la policía.
Sobre las 20:40 de la tarde, la Policía Local de Combarro recibieron el aviso del percance. Una vez desplazados hasta allí, fue necesaria la intervención de una grúa, un gato hidráulico para desencajar el coche y "mil maniobras" para lograr sacarlas del lugar. La intervención duró alrededor de una hora y veinte minutos y el vehículo recibió algún golpe y rasguño en la maniobra, que no afectó a la integridad del casco vello.
Las dos turistas recibieron una sanción administrativa por acceder a una zona que tiene el acceso restringido a los vecinos de la zona en un horario determinado.