El barrio de Estribela, en la parroquia pontevedresa de Lourizán, amaneció este lunes con la muerte de N.R.F, una mujer de 33 años que vivía en una casa abandonada de la zona junto a otros dos hombres. En torno a las 5:30, otro varón entró presuntamente en la vivienda y acabó con su vida.
El supuesto culpable es un hombre de 47 años de origen portugués y, según las primeras informaciones, tanto él como la víctima eran politoxicómanos. Ayer mismo fue detenido y trasladado a los calabozos de la comisaría de Policía Nacional de Pontevedra, pero no está previsto que pase a disposición judicial hasta mañana, miércoles 24 de mayo. Lo hará ante el juzgado de Instrucción número 2 de Pontevedra en funciones de guardia, como confirman fuentes del TSXG.
El detenido tiene otros antecedentes policiales. Presuntamente, mató a la víctima con un arma blanca, apuñalándola y dándole golpes en la cabeza.
"Una cuestión delictiva"
La conselleira de Igualdade, María Jesús Lorenzana, ha constatado que "las primeras investigaciones" sobre el asesinato apuntan a "una cuestión delictiva". Preguntada por los medios en un acto en Santiago, ha pedido ser "cautos", aunque señala que de momento "no apuntan a nada" relacionado como un caso de violencia machista, según recoge Europa Press.
De hecho, Lorenzana ha añadido que "lo primero que se sabe es que no es una cuestión de violencia de género". A partir de ahí, ha pedido "dejar" que sean las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado las que actúen.