El presidente del PP de Ourense, Manuel Baltar, ha convocado una junta directiva provincial para última hora de la tarde del viernes, en la que el partido da por hecho que presentará su renuncia a seguir liderando las filas populares en esta provincia, después de haber desistido hace unos meses de optar también a la Presidencia de la Diputación de Ourense.
Su inminente dimisión como presidente del PP de Ourense fue avanzada por el diario La Región y diversas fuentes del PP han ratificado a Europa Press que se trata del "paso lógico" que dará Baltar, después de haberse hecho a un lado en la Diputación para que el PP pudiese retener el gobierno provincial en minoría, pero como fuerza más votada.
En principio, el sucesor de Baltar al frente de la Diputación de Ourense, Luis Menor, persona de confianza del presidente del PPdeG y de la Xunta, Alfonso Rueda, es el mejor situado para colocarse al frente de una gestora en la provincia y después asumir las riendas del partido en Ourense tras el correspondiente congreso provincial.
Hoja de ruta
El pasado mes de junio, Alfonso Rueda, quien asistirá a la junta directiva del PP de Ourense de este viernes, ya había avanzado que Baltar también abandonaría la presidencia del PP de Ourense. Había comentado públicamente que mantendría este cargo hasta el próximo congreso provincial, pero que no intentaría revalidarlo en el próximo cónclave que convocase la formación.
La hoja de ruta trazada para la renovación de las filas populares en la provincia ourensana culminará ahora con la retirada de Baltar también de la Presidencia del PP de Ourense.
Este movimiento se oficializará transcurridos poco más de 20 días desde que la junta directiva provincial designase también una gestora en la ciudad, bajo la presidencia de Victoria Núñez, actualmente jefa territorial de la Consellería de Medio Ambiente e hija del que fuera uno de los impulsores de Centristas de Galicia y primer presidente democrático de la Diputación de Ourense, Victorino Núñez, quien también presidió el Parlamento de Galicia con el PP.
Causa pendiente
Baltar fue elegido senador por designación autonómica el pasado 28 de julio, tres meses después de haber sido cazado a 215 kilómetros por hora un domingo al volante de un coche de la Diputación. Una condición, la de senador, que le permite que su caso vaya a ser juzgado por el Tribunal Supremo, y no por el juzgado de lo Penal Número 1 de Zamora.
La inhibición en favor del Supremo se produjo tras numerosos intentos de juicio, primero en el Juzgado de Puebla de Sanabria y luego en el Juzgado de lo Penal número 1 de la capital zamorana, donde el político ourensano fue citado para responder por un supuesto delito contra la seguridad vial, en su modalidad de conducir a velocidad superior a la reglamentariamente permitida, tipificado en el artículo 379 del Código Penal.
Los hechos se remontan al domingo 23 de abril, cuando Baltar fue interceptado, según el informe definitivo de la Guardia Civil de Tráfico, a 215 kilómetros por hora en la A-52, a su paso por Asturianos, al volante de un coche de la Diputación de Ourense.
El PPdeG propuso a Baltar para ser representante de Galicia en la Cámara alta apenas un mes después de que éste renunciase a seguir al frente de la Diputación provincial tras 11 años. Después de no lograr la mayoría absoluta en la corporación provincial en las elecciones del 28 de mayo, buscó así facilitar que su partido pudiese conservarla, según afirmó él mismo.
Renovación tras más de tres décadas
La renuncia de Baltar permitió un cambio de ciclo en la institución provincial después de más de tres décadas ligadas a su apellido –primero de la mano de su padre, José Luis Baltar, y después bajo su mandato–.
Ahora se consuma la renovación también en el PP de Ourense, partido presidido por un Baltar también durante más de tres décadas, primero por el padre, José Luis Baltar Pumar desde principios de los 90, y desde enero de 2010 por su hijo.
El ahora presidente de la institución provincial es también alcalde de O Pereiro de Aguiar y es de la órbita de confianza de la dirección gallega del PP. Asumió el bastón de mando de la Diputación ourensana tras un acuerdo del PP con Democracia Ourensana para dejarse gobernar mutuamente en Diputación y Ayuntamiento de la capital de provincia.