Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la comunidad madrileña, se ha desplazado este jueves a Galicia y, concretamente, a Vigo, para arropar al candidato del PP a la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, en las últimas horas de la campaña electoral de cara al 18F.
Los populares han reunido a sus simpatizantes en la Estación Marítima, en donde la presidenta madrileña ha asegurado que las elecciones gallegas son "trascendentales" para Galicia, pero también para España. Y es que, tal y como ha denunciado en la ciudad olívica y ha recogido Europa Press, "se quiere hundir" a la comunidad en el "nacionalismo" para dar continuidad a "un proyecto de desmembramiento de España perfectamente organizado desde La Moncloa".
Desde Vigo, Ayuso cargó nuevamente contra Pedro Sánchez asegurando que ni él ni el Partido Socialista tienen "ilusión por ganar" si no "rabia de que lo haga el PP". Por ello, continuó, "van a hacer lo que haga falta sin valores y sin principios. Al servicio del nacionalismo. Solo al servicio del BNG, es decir: corruptela, impunidad y poder. Eso es lo único que les mueve a todos", ha anotado antes de lanzar una advertencia: "¡Ojo con el nacionalismo, que allá donde se instala no sale!"
Antes de dar la palabra a Alfonso Rueda, Ayuso criticó al resto de fuezas de izquierda refiriéndose a la vicepresidenta "comunista" Yolanda Díaz y al "cóctel" que pretende "articular" en Galicia: "Comunismo de base para apropiarse del trabajo ajeno, que les encanta vivir de los demás, con una dosis de terror para infundir miedo e imponerse por la vía fácil, bien aderezado con el nacionalismo para construir falsas identidades y decidir quién es buen y mal gallego. Y unas gotas de socialismo para repartir pobreza y superioridad moral, que se les da de fábula", ha agregado.
Una política "valiente"
La presidenta del PP local, Marta Fernández-Tapias, fue la encargada de presentar a la líder madrileña con su conocida frase: "¡Nos gusta la fruta en Vigo y en Galicia!" Además, calificó a Isabel Díaz Ayuso como una política "valiente", al tiempo que instó a Rueda "a escribir una nueva página de la historia de Galicia". Lo hará, advirtió, porque la comunidad "no quiere nacionalismos".
Entre el público, en donde se podía leer alguna pancarta con el "Me gusta la fruta", se encontraba el edil de Lalín Rafa Cuiña, hijo de Xosé Cuiña -conselleiro de Manuel Fraga- y que dejó el PP años atrás llegando a ser regidor de su localidad natal bajo las siglas de Compromiso por Galicia.