Los forenses ven "probable" que Nerea Añel hubiese podido sobrevivir de haber sido socorrida

• La policía considera que el cuerpo de la gallega Nerea Añel fue "depositado" en el río

El juicio por el presunto homicidio de la joven Nerea Añel ha concluido este jueves en la Audiencia Provincial de Ourense. Durante esta última sesión han comparecido los últimos testigos, así como los peritos, y cada una de las partes ha expresado su informe de conclusiones. El jurado popular, conformado por  cinco hombres y cuatro mujeres, deliberarán a partir del lunes, informa Europa Press.

Unos de los testimonios que se han expuesto hoy en el juicio han sido los de dos médicos forense del Instituto de Medicina Legal, que realizaron un total de tres informes sobre las causas de la muerte y el estado del cadáver de Añel, que apareció en un arroyo a unos metros del motel en el que ella y el único acusado, su novio, habían estado la tarde del 15 de enero de 2020, cuando se perdió su pista.

El cuerpo de la víctima se encontró ocho meses después, una circunstancia que, junto a la climatología y la localización, los forenses han resaltado a la hora de exponer sus versiones, advirtiendo de que no habían podido tener "las mismas certezas" que en otros casos. Así, no han clarificado que se trate de un accidente ni que fuese un crimen.

Según han explicado, no se ha podido descartar que la joven sufriese un ahogamiento ni tampoco un hipotético estrangulamiento, porque ya no había piel, músculo o hueso en la zona del cuello. Sin embargo, sí pudieron comprobar que presentaba una fractura en el cráneo y en algunas vértebras, "lesiones compatibles con una precipitación en una posición de flexión", es decir, de cabeza, y desde "una altura y una energía media-baja, desde unos 2 o 3 tres metros".

Además, en la autopsia no hallaron lesiones ni signos en la ropa que indicaran que fue arrastrada, por lo que ven "probable" que hubiese podido sobrevivir de haber recibido ayuda tras la caída.

"Tiene tolerancia a situaciones de riesgo"

La sección de Análisis de Conducta de la Policía, un grupo integrado por psicólogos y criminólogos que llevaron a cabo una reconstrucción ocular en el camino por el que presuntamente se marchó la pareja, también ha intervenido en la sesión. El grupo también analizó la información completa del procedimiento, declaraciones de testigos e informes forenses e investigación policial.

De este modo, han llegado a la conclusión de que el acusado "tiene tolerancia a situaciones de riesgo" y creen que las presuntas versiones falsas que proporcionó a conocidos, amigos o incluso a la madre de la víctima, sobre que estaba en prisión, "era un intento de desvinculación" porque "sabía que no iba a volver" y "el cuerpo suponía una amenaza".

"Si no pide ayuda es porque percibe que era una amenaza y un peligro e iba a traer consecuencias negativas", han hipotetizado desde Análisis de Conducta, que descarta que la víctima acudiese por ese camino con la intención de "permanecer oculta o ir hacia otro lugar".

Conclusiones

La Fiscalía ha sostenido hoy su versión de que se trata de un homicidio por omisión de socorro: "Es un delito de violencia de género, un ámbito en el que muchas veces, como en esta ocasión, la víctima ya no puede hablar". El fiscal cree que "aunque muy posiblemente" el acusado "no tuvo intención de quitarle la vida", "esa omisión de su obligación moral y legal equivale a la causación de homicidio".

Además, ha recordado que el acusado aceptó penas de prisión por numerosos delitos sin negarse porque "estaba deseando entrar, ya que sabía que en el barrio de Covadonga (barrio donde acudía a la pareja a comprar droga a diario) no estaba bien visto y su vida estaba en peligro".

Por otro lado, la acusación particular (que representa a la madre de Nerea Añel), coincide en que el acusado es autor de un delito por homicidio, aunque en su caso ve intencionalidad y considera que "trató de engañar" a la policía para "complicar" la investigación, causando "sufrimiento a la familia".

Mientras, para la defensa, que pide la absolución de su cliente, ha sido "una fatalidad, un accidente" y descarta totalmente la intervención. "No mintió a la policía ni a la madre, no se inventó una coartada, solo dijo lo que él creyó ver", ha manifestado.