El juez de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, a cargo de la investigación del naufragio del pesquero gallego ‘Villa de Pitanxo’ ha decidido prorrogar seis meses más la instrucción del caso con el objetivo de llevar a cabo más diligencias. Así lo ha comunicado la portavoz de las familias de las víctimas, María José de Pazo.
Recientemente se acaba de cumplir dos años del trágico suceso en el que perdieron la vida 21 personas (de las 24 que iban a bordo del barco) y, a ojos de los familiares de los fallecidos, la prórroga de las diligencias es "positiva". De Pazo ha reivindicado, como informa Europa Press, que por parte de los afectados "siempre han pedido una investigación profunda de las causas de esta desgracia con 21 víctimas".
La investigación judicial del ‘Villa de Pitanxo’ ha estado plagada de contradicciones en las versiones que ofrecieron los tres supervivientes, el patrón del barco, Juan Padín, y su sobrino, Eduardo Rial, y el marinero Samuel Kwesi. Los dos primeros contaron que el motor del Pitanxo paró de forma repentina, quedando el barco a la deriva en medio de una fuerte tormenta, por lo que el mar acabó engulléndolo y con poco margen para que los 24 tripulantes pudiesen hacer algo para salvar sus vidas.
Sin embargo, Kwesi aseguró que el pesquero había embarrado (enganchado las redes al fondo del mar), por lo que el capitán trató de hacer varias maniobras para solucionar este problema. Así, el barco comenzaría a escorarse al no ser capaz de soltarse, entrando agua hasta que el motor se paró, sin escuchar a los marineros que pedían que soltase las redes.
21 delitos de homicidio por imprudencia
El juez Ismael Moreno vio indicios de 21 delitos de homicidio por imprudencia, imputando a Padín por los mismos. Tras declarar ante el magistrado hace ya más de un año, se le impuso la retirada del pasaporte y una medida cautelar que lo obliga a comparecer cada 15 días en sede judicial y permanecer localizado.
Por otro lado, la versión de Samuel Kwesi se ha considerado "verosímil" de acuerdo con el informe elaborado por la Comisión Permanente de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (CIAIM), a partir de imágenes y otra información recopilada del pecio del barco, al que se accedió en mayo de 2023.