El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha asegurado que Talgo le ha trasladado que entregará los primeros trenes Avril de ancho variable a partir del próximo lunes, 8 de abril.
En cualquier caso, Puente no se ha comprometido a que los trenes estén entregados en esa fecha, debido a los retrasos que lleva acumulando la compañía en los últimos años, según ha recordado en una entrevista en Onda Cero recogida por Europa Press.
"Talgo nos dijo que los trenes se entregarán a partir del 8 de abril, pero también nos dijo anteriormente que nos los entregaba el día 1 y esto no se ha producido, así que no puedo comprometer una fecha. Pero sí parece que estamos ya muy cerca, estamos hablando probablemente de días o como mucho de semanas", ha explicado.
Estos trenes se destinarán principalmente a la conexión de Madrid con Galicia y con Asturias, regiones en las que es necesario que los trenes cambien el ancho de su eje para poder seguir circulando a partir de Ourense y de Pola de Lena, mejorando de esa forma los tiempos actuales y las frecuencias.
El ministro también se ha referido a la posibilidad de abrir de nuevo la línea de tren entre la capital española y Aranda de Duero hacia Burgos, asegurando que las cosas "no pintan bien" para esa reapertura. Puente ha señalado que se está llevando actualmente un estudio de viabilidad para valorar la rehabilitación del túnel de Somosierra, donde hace 13 años se quedó atrapada una máquina bateadora y que supuso la suspensión de esa línea.
Retirar la bateadora y renovar el túnel y las vías podría costar entre 1.300 y 1.400 millones de euros, un coste que el ministro cree que ofrece un beneficio "muy desequilibrado", sobre todo teniendo en cuenta que Burgos ya está conectada con Madrid por la alta velocidad de Valladolid.
"No quiero generar falsas expectativas. No pinta bien porque la relación coste-beneficio de esa infraestructura está muy desequilibrada. No parece que vaya a ser sencillo la puesta en marcha de ese corredor de nuevo", ha indicado.
Respecto a otra reivindicación, la de Marbella de tener tren, el ministro también ha descartado que se trate de una opción viable, al entender que la prolongación del cercanías a esta ciudad tendría muchas paradas y no haría atractivo el servicio frente al coche, y que una línea de alta velocidad resulta complicado.