Más de 100.000 hogares de Galicia están amenazados de quedarse sin servicio de línea fija y ADSL por el cierre escalonado de las 8.526 centrales de cobre propiedad de Telefónica que hay en España, que se intensificará este mes coincidiendo con el centenario de la compañía y se completará previsiblemente en mayo del próximo año.
Eso es lo que se desprende de los datos publicados en marzo por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y el Instituto Nacional de Estadística (INE), tal y como expone Europa Press. En total hay 104.100 familias en Galicia que cuentan actualmente con servicios contratados de cobre y que quedarán en riesgo de aislamiento a lo largo de los próximos meses si no efectúan la migración a fibra óptica.
En la comunidad gallega siguen funcionando más de 600 centrales de cobre y su cierre está previsto para este año. Telefónica inició este cierre progresivo de la red de cobre en el año 2014 y su fecha límite es el 27 de mayo de 2025. Así, a nivel regional, la clausura de la red afectaría a la conectividad (bien a través de la línea de teléfono fijo o la conexión ADSL a Internet) a, concretamente, 39.400 hogares en la provincia de A Coruña, 16.600 en Lugo, 16.300 en Ourense y 31.800 en Pontevedra.
"Si tienes contratado un producto de cobre con cualquier operador y tu hogar está bajo el paraguas de una de las centrales afectadas por el cierre, tendrás que cambiarte a una oferta alternativa, seguramente con fibra o radio. Tu nueva instalación será totalmente gratuita y además podrás conservar tu número de teléfono actual", explican a Europa Press desde la CNMC, el organismo encargado de regular los procedimientos para garantizar que los operadores puedan ofrecer un servicio alternativo a sus clientes ante el cierre de los servicios de cobre.
Objetivo: fibra para todos
El objetivo del cierre de la red de cobre es lograr la "cobertura total" del territorio a través del despliegue de fibra óptica de Telefónica, que proporciona mayores prestaciones, consume 18 veces menos y reduce el impacto ambiental. Con todo, la cobertura FTTH –del inglés ‘Fiber To The Home’– dista aún de ser, especialmente en algunos municipios rurales de Galicia, una realidad al alcance de todos.
Según los últimos datos disponibles publicados por el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, fechados en junio de 2022, existían en Galicia 388.095 viviendas sin conexión mediante fibra óptica y con una conexión a internet inferior a los 100 Gbps de velocidad. Dicho de otra forma: solo el 63% de los hogares de la provincia de Lugo, el 72% de los de Ourense, el 81% de los de Pontevedra y el 83% de los de A Coruña contaban con una cobertura de fibra adecuada.
Por suerte, a pesar de que no existen datos actualizados para corroborarlo, la situación ha cambiado bastante desde entonces gracias a operadores como Adamo o compañías como Rede Aberta, que han redoblado sus esfuerzos para acercar la fibra a los núcleos rurales. El despliegue de este tipo de conexión está siendo financiado en todo el territorio a través del programa UNICO-Banda Ancha del Estado con fondos europeos del Plan de Recuperación.
"El despliegue de telecomunicaciones es una competencia estatal y las obras las están acometiendo las operadoras. El programa UNICO del Gobierno es a través del cual se está haciendo todo el despliegue", precisan fuentes de la Axencia para a Modernización Tecnolóxica de Galicia (Amtega).
Radio enlace, la alternativa para el rural
Ante el inminente fin de la era de cobre la fibra óptica se perfila como la única opción posible, pero el riesgo de desconexión sigue existiendo en muchos núcleos rurales de Galicia. En muchos de estos casos, el radio enlace o la conexión por radio se ha impuesto como la mejor alternativa. Por ejemplo, en Penarrubia, un pequeño núcleo a poco más de seis kilómetros de la muralla de Lugo, no cuenta con fibra óptica.
"Aquí tenemos internet por radio. Tenemos un módem que va con una tarjeta de móvil dentro. Es la única opción que nos dieron", asegura Antía, residente en esta aldea ubicada a apenas cinco minutos en coche de la capital. La conexión por radio también es la única vía para la conexión de Manuel, vecino de la aldea de Vilasante, en el extrarradio de Sarria. "Aquí arriba hay una antena que conecta directamente con el router. No será como la fibra pero el internet va rápido. Es una solución muy buena. Ahora tengo 4G pero hay casas a las que ya está llegando el 5G", explica.
Las conexiones a internet por radio enlace WiFi, que se llevan a cabo mediante ondas de radio que facilitan la transferencia de información entre diferentes puntos, son de fácil instalación y proporcionan cobertura a zonas donde es difícil dar servicio con otras tecnologías.
Otros municipios rurales de Galicia ya disponen de fibra óptica gracias al esfuerzo de inversión de los últimos años, como es el caso de Outeiro de Rei (Lugo), de 5.300 habitantes. "Al tener muchos núcleos y muy dispersos tuvimos que hacer una inversión para colocar 600 postes de madera y así logramos que nos desplegaran la fibra óptica. Están interconectadas todas las líneas eléctricas así que todo el que tiene electricidad, tiene la posibilidad de conectarse a la fibra", explica al respecto, en declaraciones a Europa Press, el alcalde del municipio, el popular José Pardo.
El regidor valora la acción como una inversión en un "servicio imprescindible de cara al futuro", ya que la cobertura de fibra óptica no solo permitirá "teletrabajar y estudiar a los más jóvenes" o "acceder a internet a los que tienen una granja" sino proteger a "la población que es más vulnerable".
"Algunas personas mayores que tienen teleasistencia estaban preocupadas por perder el teléfono fijo, así que dimos instrucciones a nuestros servicios sociales para que les ayuden a tramitar el alta de la línea y cualquier otra cosa que necesiten", concluye José Pardo.