PONTEVEDRA, 27 Nov. (EUROPA PRESS) –
El juicio contra una veintena procesados por el alijo de 1.700 kilos de cocaína intervenido en el remolcador ‘Titán III’ en 2018 afronta su recta final esta semana, cuando finalizará el juicio y se presentarán los informes.
Según detallan fuentes judiciales, la vista continuará este miércoles en la Audiencia Provincial de Pontevedra y concluirá el viernes de la misma semana.
En concreto, el juicio, que había sido suspendido en tres ocasiones, se retomó el pasado mes de septiembre. Desde entonces, se acordó archivar la causa contra uno de los procesados, que inicialmente eran 21, mientras las defensas solicitaron la nulidad del proceso por supuestos defectos en la instrucción. No obstante, el tribunal desestimó las cuestiones previas, tras lo que el juicio se reanudó con las declaraciones de los acusados.
En su escrito de acusación, el Ministerio Público señala que los procesados "estructuraron sus relaciones" con "un esquema de actuación piramidal" para "participar lucrativamente en la importación de un cargamento de cocaína" llegado a España por vía marítima.
Al comienzo de la investigación, existieron indicios de que Manuel Charlín y uno de sus hijos participaron en los preparativos y la coordinación de un transporte de droga desde Sudamérica. No obstante, en el momento de cerrar la instrucción, el juez acordó seguir la causa contra 21 personas de las 30 inicialmente vinculadas al caso, de forma que la archivó con respecto a nueve personas entre las que se encontraban Charlín y uno de sus hijos.
La Fiscalía mantiene que, a finales de 2016, tres de los acusados planificaron la introducción del cargamento de estupefacientes. Sin embargo, remarca que su actuación "no se limitó a una única operación de narcotráfico", ya que "aunaron sus esfuerzos guiados a trabar contactos con terceros que les pudieran posibilitar distintas vías de introducción de estupefaciente con varias alternativas de transporte".
Abordaje del ‘Titán III’
Mediante la investigación policial, que se desarrolló durante varios meses, el 7 de agosto de 2018 se llevó a cabo el abordaje del remolcador ‘Titán Tercero’ y se detuvo a sus cuatro tripulantes. En su interior se halló un cargamento que superaba las 1,7 toneladas de cocaína, con una riqueza media del 84,8%, y un valor en el mercado ilícito de al menos 59,2 millones de euros.
Asimismo, al día siguiente, se interceptó un segundo barco, el pesquero ‘Sempre Cacharelos‘, que se encontraba a 110 millas del punto de encuentro "concertado para el trasvase de la droga que debía recibir" del remolcador. En las siguientes horas se produjeron las detenciones del resto de los investigados.
Por estos hechos, el Ministerio Público solicita 9 años de prisión para cuatro de los seis coordinadores del operativo y 200 millones de euros en multas, y para los otros dos pide 12 años de prisión y 340 millones de euros en sanciones. Para el resto de los procesados solicita penas entre 10 y 13 años y medio de prisión, y multas de entre 200 y 340 millones de euros.