A las 15:30 horas de este martes, un particular comunicó al 112 Galicia del hundimiento de parte de un carril del puente que une Leiro con Pontearnelas. El viaducto por el que discurre la PO-300 presentaba un hundimiento de unos 50 centímetros.
Hasta el lugar acudieron enseguida los agentes de la Guardia Civil de Tráfico y de la Policía Local, el servicio de mantenimiento de la vía de circulación, los voluntarios de Protección Civil de Vilanova de Arousa y los Bomberos del Salnés. Fueron estos quienes informaron al 112 Galicia de la rotura de un cable en la parte baja del puente, provocada por el paso de un tráiler.
Por este motivo, las fuerzas de la orden también cerraron al tráfico dos vías secundarias de la zona: la EP-9301 y la EP-9703, así como la propia circulación en el puente. Además, como medida preventiva, interrumpieron el tránsito en el paseo que va por debajo de la estructura.