La Xunta celebrará este jueves 19 de septiembre el congreso Reforma del mapa municipal de Galicia, al que está prevista la asistencia de técnicos, académicos y gestores municipales que compartirán sus experiencias en el que se refiere a la gestión municipal con el objetivo de racionalizar la planta municipal.  

El congreso acogerá la presentación del Estudio sobre la planta local gallega realizado en colaboración con la Fundación Juana de Vega y las tres universidades gallegas por parte de representantes de estas entidades. Se trata de un análisis multidisciplinar sobre la reforma del mapa municipal gallego y el impulso de nuevos procesos de fusión municipal y otras fórmulas de cooperación intermunicipal.

Durante la elaboración del estudio se analizaron las experiencias de los ayuntamientos Oza-Cesuras (A Coruña) y Cerdedo-Cotobade (Pontevedra), la situación anterior y posterior a las fusiones, su repercusión económica y la calidad de los servicios prestados al vecindario. Como resultado de estos procesos, estos ayuntamientos tienen una mejor capacidad financiera para afrontar con mayores garantías el reto de fijar población en su territorio y buscar su viabilidad futura. 

Sanxenxo-Meaño y la comarca del Deza

Este domingo, el diario praza.gal adelantaba siete posibles fusiones en toda Galicia, sobre las que se pronunciaba este lunes Alfonso Rueda. Tras la rueda de prensa del Consello, el presidente de la Xunta aclaraba que solo se llevarán a cabo fusiones "voluntarias". Desde la Xunta recuerdan que el estudio elaborado por la Fundación Juana de Vega incluye encuestas realizadas a un millar de gallegos y gallegas, que mostraron predisposición favorable a esta fusión voluntaria de ayuntamientos. 

En concreto, se adelantó que podría proponerse la fusión entre Sanxenxo y Meaño, con el fin de mejorar la gestión municipal de ambas localidades pontevedresas, así como atraer inversión pública y ayudar a fijar población en ambos territorios. Por otro lado, también se propondría la unión de varios municipios de la comarca del río Deza, concretamente Lalín, Rodeiro y Dozón, a los que también podrían unirse Agolada, Silleda y Vila de Cruces

En definitiva, con este estudio la Xunta pretendía abrir un debate sobre la necesidad de actualizar el mapa político-administrativo de Galicia, así como evaluar si la planta municipal es eficiente, o estudiar alternativas que mejoren su eficacia y mitiguen los problemas que genera la despoblación. En esta línea, el ejecutivo aboga por la necesidad de acometer reformas en la planta municipal y apuesta por las fusiones voluntarias y por otras formas de cooperación para la mejora de los servicios públicos que los ayuntamientos prestan a la ciudadanía, en especial nos de menor población