Según un estudio elaborado por la Confederación Intersindical Galega de Ourense, más de 18.000 personas de esta provincia perciben unos ingresos anuales que no superan los 3.000 euros. Además, el 35% de los asalariados cobra por debajo del Salario Mínimo Interprofesional. El secretario comarcal, Anxo Pérez Carballo -que estuvo acompañado por la economista Natividad López-, calificó la situación de "dramática".
Con respecto a lo anterior, además, Carballo tildó de "escalofriante" el hecho de que el número de mayores de 90 años triplique al de menores de cuatro. En este sentido, el porcentaje de merma poblacional es del 8% -los mayores de 65 años son el 32% de la población y los menores de 20, el 13%-. "Ourense cuenta con una población inmigrante que no es capaz de paliar la pérdida de población ni su envejecimiento", ha concluido López -y ha recogido Europa Press-.
La situación en lo tocante a las pensiones no es más esperanzadora según la CIG, pues la provincia cuenta con las más bajas del Estado: La media es de 888 euros. En lo que tiene que ver con las afiliaciones a la Seguridad Social, el informe recoge los datos de diciembre de 2021 y diciembre de 2023 -para medir el impacto de la última reforma laboral-. El incremento en este sentido fue del 2,3%, aunque también aumentaron los contratos indefinidos y bajaron los temporales.
Pese a lo anterior, desde la CIG han matizado que los contratos fijos discontinuos han crecido en un 95% en dos años, los indefinidos a tiempo parcial, un 40%, y los indefinidos a jornada completa, un 19,9%. "Crece la contratación indefinida, pero con jornadas parciales y contratos fijos discontinuos", concluyen en la CIG.
Se agrava la brecha de género
A mayores observan que "la brecha de género sigue agravándose", pues el 66% de las mujeres tienen un contrato indefinido frente al casi 78% de los hombres. Además, el 33,5% de las mujeres cuentan con un contrato temporal cuando en el caso de los hombres es el 22%, y sólo el 45% de ellas tienen un contrato indefinido a tiempo completo, mientras que ellos llegan al 69%.
Por último, y según la Agencia Tributaria, los ingresos de la clase trabajadora aumentaron un 4,9% en la provincia, pero el IPC creció un 5,7%. Lo anterior se traduce en una pérdida del poder adquisitivo en ocho décimas "que no se produjo en el resto del estado donde los salarios crecieron un 5,8%".
En definitiva, donde más aumentaron los ingresos fue en la población con mejores salarios. Así, 83 personas en la provincia ingresan más de 235.000 euros al año de media y sus ingresos se incrementaron más de un 5%. Mientras que las personas con menos ingresos, "unas 18.000" aumentaron sus salarios únicamente un 2,7% "con ingresos brutos que al año no llegan a 3.000 euros".