Las reuniones para la negociación de una hipotética moción de censura al alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, continúan. Este pasado jueves, PP, PSOE y BNG volvieron a sentarse a la mesa en el Liceo de Ourense; con todo, los nacionalistas se mantienen firmes en su decisión de solo dar su apoyo a un candidato socialista y se niegan a participar en otro encuentro hasta que se firme la moción.

"Nosotros no vamos a hacer alcalde o alcaldesa a una persona del PP", ha afirmado con rotundidad el edil del BNG, Xose Manuel Puga. "En el momento en que se firme estamos dispuestos a seguir hablando de modo constructivo, sin ningún problema, de las cosas necesarias para Ourense", ha remarcado, en palabras recogidas por Europa Press.

Así, el BNG ha entregado un documento a PSOE y PP con la firma del concejal nacionalista para que den los números de la moción de censura (14 firmas). "Me comprometo a ir a verificarla delante de la secretaría del pleno para que quede constancia", ha dicho Puga para insistir en que "no mareen más a la gente, o hay moción de censura o no hay moción de censura y seguirá siendo Jacome alcalde".

"Frivolidad máxima"

Como ya había pasado en la primera reunión, desde el Partido Popular han criticado a los nacionalistas, a los que han vuelto a acusar de "frívolos". "No os lo podéis ni imaginar, una frivolidad máxima", ha declarado la coordinadora popular, Noelia Pérez.

A ojos del PP, al Bloque "no le interesaban los compromisos, venían a estampar la firma y hoy la materializaron". Además, consideran que conocer al candidato antes de hablar de acuerdos para la ciudad (lo que reclama el BNG) es "empezar la casa por el tejado" y sostienen que "sin unos buenos cimientos una casa no se mantiene".

"Lo que nosotros queremos es garantizarle a los ciudadanos de Ourense que si hay un acuerdo va a ser uno que beneficie a toda la ciudad, y no vamos a permitir que el BNG imponga una línea roja a la segunda fuerza política de esta ciudad, que es el PP", ha remarcado Pérez.

El PSOE, "dispuesto" a liderar

Una vez más los más optimistas han sido los socialistas, que han dejado claro que están "dispuestos a liderar la alternativa de gobierno estable", expone Europa Press, "pero todos tenemos que comprometernos a que en los próximos tres años arrimaremos hombros y apoyaremos a quien gobierne".

La portavoz del PSOE, Noelia Gómez, ha insitido en que "cuanto más tarden los partidos en ponerse de acuerdo peor será la situación de la ciudad". En este sentido, considera que "se podrá llegar a un hecho histórico en la ciudad dando un relevo al gobierno actual" bajo el acuerdo "sine qua non" de gobernabilidad; los catorce puntos que proponían los socialistas en el llamado ‘Pacto de la Concordia’, y a los que se van a incorporar otras peticiones, como el transporte metropolitano que solicita el PP.

"Creo que puede haber distintos caminos, pero si realmente queremos cambiar el futuro de Ourense solo hay una dirección", ha reiterado la socialista, que no ha entrado a valorar si será ella la candidata de su partido. "El grupo municipal socialista tiene un gran banquillo para asumir esa responsabilidad", declara, "Será la organización la que decida y siempre avalado por la militancia".

No obstante, a preguntas de los medios, el Partido Popular también ha dicho que se ha ofrecido a liderar la alternativa de gobierno durante la reunión. "Creo que eso fue lo que sacó de quicio al representante del Bloque Nacionalista Galego", ha resaltado la 'popular' Noelia Pérez, que considera que su partido también tiene "buen banquillo".

Pérez, preguntada sobre si el PP municipal vería con buenos ojos un pacto como el sacado adelante en O Carballiño, donde el PSOE mantiene la alcaldía durante tres años y el último de mandato pasará a ser del PP, ha respondido que "también veríamos con buenos ojos lo contrario, tres años para el PP y el último para el PSOE".

Así las cosas, los partidos no han convocado una nueva reunión para seguir tratando estos temas porque, según el PSOE, "ahora cada organización tiene que someterlo a consideración dentro de su legitimidad y los plazos los marcarán públicamente cuando cada uno salga a decir lo que tiene que decir".