La Fiesta de la Arriba regresa a la villa de Baiona del 4 al 6 de marzo tras el parón por la pandemia, con la ilusión de congregar a una multitud de visitantes. La Subdelegación de Gobierno en Pontevedra y el Concello celebraron ayer una Xunta Local de Seguridade para centrarse en promover y coordinar las medidas durante el tradicional evento.
Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado pondrán en marcha controles de circulación en los accesos a Baiona, tanto con medios terrestres como aéreos. También se activarán controles de drogas y alcoholemia para prevenir la posible falta de responsabilidad de los conductores.
Además, los agentes de la Policía Local ejercerán de apoyo durante la celebración de las actividades festivas. En la Xunta Local se revisó el plan de protección elaborado por el Concello, en el que se establecen los medios municipales para garantizar la seguridad en el evento.