VIGO, 7 Abr. (EUROPA PRESS) –
Una firma auxiliar del sector de automoción y un exencargado de la empresa, denunciado por acoso laboral, han reconocido los hechos y han aceptado pagar una indemnización a la víctima, una empleada de la factoría, situada en el municipio de Redondela, que había mantenido una relación sentimental con el acosador.
Así, tras llegar a un acuerdo extrajudicial, el denunciado y la compañía deberán pagar solidariamente la compensación a la mujer, por daños y perjuicios, para subsanar la pérdida salarial de la trabajadora durante el tiempo que estuvo de baja en este proceso.
En el acta de conciliación del juzgado, a la que ha tenido acceso Europa Press y en la que se recoge el acuerdo, empresa y trabajador admiten la situación de acoso laboral con el agravante de género, ya que el denunciado había mantenido una relación con la víctima, y llevaba a cabo el acoso prevaliéndose de su superioridad jerárquica en el ámbito laboral.
De hecho, se abrió una investigación interna en la empresa que concluyó que se estaba produciendo esa situación de acoso, y varios testigos confirmaron que el exencargado asignaba puestos a la demandante para los que estaba "limitada" debido a su estatura y también funciones para las que no tenía la formación necesaria.
Asimismo, pusieron de manifiesto los comentarios sexistas y las humillaciones a las que sometía a esta trabajadora, así como su control sobre ella y su persecución. La propia empresa retiró al hombre su condición de encargado a raíz de las conclusiones de esa investigación.
"Falta de protección" a la trabajadora
En una rueda de prensa este jueves, la técnica de Igualdade de la CIG, Ester Mariño, se ha referido a este proceso, y ha lamentado la actitud "constante" de la empresa de obstaculizar el proceso, algo "común" para muchas compañías. "Lejos de ayudar y proteger a la víctima, desde el comienzo solo fueron trabas a la hora de que esta mujer pudiese presentar su denuncia. En la propia tramitación incluso adoptando medidas de penalización contra ella como fue el cambio de turno", ha lamentado Mariño.
"La propia empresa reconoce esta situación cuando indemniza a la trabajadora por la falta de protección y admite su culpa en este procedimiento", ha reivindicado la también secretaria de Mulleres en la CIG de Vigo.
Intento de acuerdo previo
El sindicato CIG ha recordado que, tras la presentación de denuncia en los juzgados por esta mujer, la empresa y el denunciado intentaron un acuerdo con ella para evitar el juicio fijado para junio pasado, ofreciéndole una compensación económica con la condición de que constase que el trabajador no asumía los cargos, y la mujer renunciaba a acciones judiciales. La denunciante rechazó dicho acuerdo y el proceso continuó en los tribunales.
La pasada semana, para cuando se había fijado la vista en una sala de lo Social de Vigo, las partes alcanzaron un acuerdo basado en el informe elaborado por la comisión de acoso de la propia empresa, en el que se da por probado ese acoso laboral y por razón de género.