El pasado sábado varios conductores alertaron a emergencias de que un vehículo circulaba en sentido contrario por la A-55 a la altura de O Porriño, en Pontevedra. Tras recibir el aviso, varias patrullas de la Guardia Civil lograron interceptar al conductor del turismo, que se encontraba a la altura del kilómetro 17 de la autovía en sentido Tui, momento en el que se constató que el conductor presentaba "evidentes síntomas de encontrarse bajo los efectos de alcohol".

Por esta razón, se realizó una prueba de alcoholemia al conductor, vecino de Gondomar de 41 años, que arrojó un resultado positivo, triplicando la tasa máxima permitida. Asimismo, en la prueba de drogas dio positivo indiciario en THC y anfetaminas, razones por las que se instruyeron diligencias por los supuestos delitos de conducción temeraria y conducción bajo los efectos del alcohol y/o las drogas.

El conductor podría enfrentarse a penas de prisión de tres a seis meses o a una multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días. En cualquier caso, se le sancionará con la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años. Por otro lado, el delito de conducción temeraria, el otro por el que se investiga al implicado, se castiga con penas de prisión de seis meses a dos años y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta seis años.