Nigrán (Pontevedra) guarda un tesoro en lo alto de la parroquia de Panxón: el Templo Votivo del Mar, una joya arquitectónica de Antonio Palacios que desde hace tiempo adolece en un estado de semiabandono. La Xunta de Galicia ha concluido estos días los trabajos de análisis y diagnóstico de las patologías del monumento, tal y como explicó esta semana la directora xeral de Patrimonio Cultural, Mª Carmen Martínez, en el Parlamento gallego.
"Ninguno de los estudios realizados anteriormente fueron capaces de determinar con exactitud la causa que provocaba el daño en las vidrieras ni la forma adecuada para resolverlo y protegerlo. No era posible realizar propuestas con soluciones que supusieran una completa alteración de la obra, como hacía algún proyecto anterior, construyendo unas vidrieras completamente nuevas", detalló la directora de Patrimonio.
Ahora, la recuperación del Templo Votivo está más cerca que nunca. Los trabajos realizados recientemente por arquitectos, asesores especialistas en conservación de bienes culturales o expertos en topografía, entre otros profesionales, permitirán la redacción de un proyecto de rehabilitación adecuado. Así, la Xunta prevé licitar y contratar las obras este mismo año.