El director general de Justicia de la Xunta de Galicia, José Tronchoni, y el juez decano de Vigo, Germán Serrano, han acordado esta mañana en una reunión afrontar este mes de agosto las obras de mejora de la nueva Ciudad de la Justicia de Vigo. Algunos de los problemas se detectaron tras los primeros traslados y supusieron numerosas quejas por parte de los trabajadores.

Según ha informado el Gobierno autonómico, entre las mejoras que se van a acometer el próximo mes figuran acciones relacionadas con la acústica de las salas. Así, se va a proceder a la instalación de estores y al tapizado de las sillas en la sala de vistas del jurado para evitar la reverberación. Se iniciará también un estudio de la acústica de la sala de vistas del Juzgado de Instancia número tres.

Por otra parte, se instalará una doble puerta para una mayor protección del viento y de la lluvia, así como una tarima en el acceso para igualar el suelo y estores en las ventanas que no dispongan de ellos. También se van a ampliar la sala de vistas de las secciones de la Audiencia Provincial y otra sala igual para su asignación a los juzgados del Penitenciario, con habilitación de entrada para las personas detenidas por el corredor interior de seguridad.

Otras de las mejoras previstas son la habilitación de mesas de trabajo para los profesionales de los medios de comunicación, la contratación del mobiliario de la biblioteca, la instalación de un panel de señalización en la entrada y la recolocación de la Policía Nacional y de un local de enlace con los juzgados en la antigua sala de prensa. Ya en el exterior, se colocarán bolardos y bancos en la plaza.

Un espacio para el Colegio de Abogados

Además de las actuaciones inicialmente previstas, se ha decidido habilitar un despacho en el juzgado de guardia para el Colegio de Abogados, con el fin de que estos profesionales puedan entrevistarse de manera reservada con sus clientes antes de las declaraciones.

Con todas estas medidas, la Xunta busca dar respuesta a las necesidades que se fueron detectando durante el traslado y puesta en funcionamiento de las nuevas instalaciones judiciales. "El Gobierno gallego se comprometió desde que se tuvo conocimiento de desajustes en la funcionalidad de los espacios a estudiar y corregir todas las cuestiones susceptibles de mejora", señalan desde el ejecutivo autonómico.