El faro de Panxón es desde hace tiempo un elemento inerte del mobiliario urbano de Nigrán (Pontevedra), sin uso, cubierto de unas cuantas pintadas. Sin embargo, esa imagen pronto desaparecerá y dará paso a un nuevo espacio de polivalente destinado a fines recreativos: el Concello ha dado su visto bueno al proyecto de rehabilitación del edificio.

Tras conseguir el aprobado de la Autoridad Portuaria, el Ayuntamiento de Nigrán ya ha dado también luz verde al plan de recuperación del faro de Canido, una propuesta que se anunció por primera vez hace más de un año. Ahora se iniciará el expediente de contratación de las obras; su presupuesto de inversión asciende a los 227.214 euros, de los cuales 132.730 serán financiados con fondos europeos Next Generation.

El proyecto ha sido diseñado por el arquitecto nigranés Severo Fernández y contempla la creación de un espacio amplio y aislado, dos baños adaptados, un almacén y un cuarto de instalaciones. Asimismo, se aislará la planta, la fachada, el techo y el suelo, se mejorarán los acabados exteriores, se sustituirá la carpintería y se limpiará la fachada de piedra.

En cuanto a su futuro uso, el alcalde de Nigrán, Juan González, declara que no quieren adaptarlo a "Un fin concreto", porque "el objetivo es que pueda tener un uso polivalente, lo que implica que pueda acoger desde exposiciones hasta talleres o charlas".