Juan Carlos Santórum, considerado por los investigadores el cabecilla de la red que intentó introducir en Galicia 3,8 toneladas de cocaína a bordo del buque MV Karar, en abril de 2020, se ha negado a declarar en el juicio que se sigue por estos hechos en la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo.

Tras las declaraciones de los tripulantes del barco, este martes llegó el turno de Santórum, que ha señalado que conoce los hechos de los que le acusan, pero ha negado tener relación con ellos. "Yo no cometí ningún delito", ha proclamado, según recoge Europa Press.

A preguntas de la magistrada presidenta ha repetido varias veces que quería declarar al final de la práctica de la prueba, pero la jueza le ha recordado que ése era el momento de declarar. Entonces, Santórum se ha remitido a su última declaración en fase de instrucción, y ha pedido ejercer su derecho a pronunciar la última palabra, al final del juicio.

Igualmente, otros dos acusados más (defendidos por la misma letrada que Santórum), el hermano del propio Santórum y Emilio Xosé R.C., también se han negado a declarar y usarán su derecho a la última palabra. Estos dos procesados han repetido, casi palabra por palabra lo dicho por Juan Carlos, incluso levantando la voz e interrumpiendo a la jueza, que ha tenido que apercibirles.

Declaración de un empresario naval

En la jornada de este martes ha declarado también (solo a preguntas de su letrado), Fidel F.B., un empresario dedicado a la venta y reparación de embarcaciones, que ha reconocido que conoció a Santórum hace tiempo, en una subasta del Plan Nacional sobre Drogas.

Según ha relatado, el arousano le había encargado construir una embarcación de recreo, de 7 metros de eslora, pero ha negado que se tratase de una planeadora. "No tiene apenas espacio, es pequeña, si sale por fuera de Cíes o de Ons, y hay un poco de mar, se hunde", ha afirmado.

Con respecto a otros contactos con Santorum, o a las conversaciones telefónicas (reproducidas en la sala) con diversas personas, ha recalcado que todas fueron por motivos profesionales, como pedir presupuestos de motores para clientes, organizar transportes de embarcaciones para conocidos, etc.

Tripulantes

Por otra parte, este martes también han declarado el resto de tripulantes nepalíes del MV Karar que quedaban por hablar, y todos ellos han reconocido los hechos y han confirmado que fueron informados, días antes de zarpar de Panamá, de que harían un transporte de mercancía ilegal, de droga. El segundo oficial, otro ciudadano nepalí, fue el encargado de explicarles que se iba a llevar a cabo ese transporte.

Igualmente, todos han coincidido en que el gallego que iba a bordo, José Manuel B.G., no tenía ninguna función como tripulante, sino que su papel se limitó a "contar los fardos" de cocaína cuando éstos fueron cargados a bordo del Karar, frente a las costas de Colombia.

Delitos y penas

En este juicio se sientan en el banquillo como acusados 28 personas, a las que la Fiscalía atribuye los delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal. Además, a uno de ellos le imputa también un delito de tenencia ilícita de armas, y a un funcionario de Aduanas y su mujer les atribuye un delito de blanqueo de capitales.

Juan Carlos Santórum se enfrenta a la pena 18 años y medio de cárcel por tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal. Fiscalía también pide que pague una multa de 438 millones de euros. Para el resto de procesados, el ministerio público pide 13 años y medio de cárcel (dos años más para el acusado también por tenencia de armas y 6 años más para el matrimonio acusado de blanqueo).