"La biodiversidad global está experimentando una rápida merma, impulsada en gran parte por los cambios en el uso de la tierra y el cambio climático". De este modo destaca el grupo de investigación AF4, de la Escuela de Ingeniería Forestal de la Universidad de Vigo, la problemática que centra el proyecto Resilient2Change.
La iniciativa tiene como principal objetivo el diseño de un "modelo de predicción y explicación" de los efectos sobre la biodiversidad tanto del cambio climático como de las variaciones que puedan darse en el uso del suelo, como la conversión de zonas forestales en agrícolas o el abandono de tierras. Partiendo del trabajo con imágenes por satélite, los investigadores e investigadoras trabajan en el desarrollo de algoritmos que comprendan un conjunto de variables climáticas, antropogénicas, territoriales o ambientales, "con las que podríamos analizar cómo las alteraciones de alguna de ellas puede afectar a las otras y, por lo tanto, a la conectividad ecológica del territorio", señala Xana Álvarez, investigadora principal de este proyecto. El desarrollo de estos "modelos predictivos" haría posible no solo evaluar la posible pérdida de biodiversidad, sino también el impacto que podrían tener esos cambios en los ecosistemas, "especialmente el riesgo de inundaciones e incendios", lo que a su vez permitiría definir propuestas de actuación dirigidas a mitigar sus efectos.
Seleccionado en la convocatoria de proyectos de transición ecológica y digital del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, financiada a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, Resilient2Change (Desde un cambio climático amenazando lana biodiversidad hacia una red natural resiliente) pone el foco en la necesidad de generar "una red natural coherente y resiliente", como "una de las herramientas de conservación de la biodiversidad más poderosas". Junto a Álvarez, en esta investigación participan también los integrantes del grupo AF4 Carolina Acuña, Mario García, Carlos Peco, Diego Barba, Enrique Valero, Luis Ortiz, Pedro Lago y Juan Luis Rodríguez, así como los investigadores del grupo Ecosot Juan Vidal y María Gómez.