SANTIAGO DE COMPOSTELA, 12 Dic. (EUROPA PRESS) –

Diez años de actividad cultural y más de 10.000 socios. Ese es el balance del Liceo Mutante, asociación que apoya y promueve la cultura autogestionada en Pontevedra desde 2011 cuyo futuro se ve ahora amenazado como daño colateral del eventual cierre de Ence y el negocio urbanístico.

Durante toda su trayectoria, los responsables de este centro de autogestión cultural se han posicionado (y se posicionan) a favor de la salida de la fábrica de celulosas de su actual ubicación en Lourizán, en terrenos frente a la ría.

Sin embargo, las sentencias que presagian su marcha (puesto que anulan la prórroga que le concedió a la pastera el Gobierno de Mariano Rajoy) han conllevado una serie de movimientos de constructores ante la revalorización urbanística de la zona.

Mollabao es uno de los puntos afectados. Situado justo antes de Lourizán, este barrio acoge numerosas casas en estado de semiabandono. Esa era también la situación del Liceo Mutante antes de que llegaran sus actuales inquilinos, que cuidaron los camelios del jardín con vistas al mar, hicieron una cabaña en un árbol y plantaron una huerta.

"La tormenta perfecta"

"Durante todo este tiempo llevamos pagados más de 90.000 euros de alquiler y resulta que el inmueble no está ni registrado del todo. Ha sido una sorpresa", destaca, en declaraciones a Europa Press, la socia Sara Pena, durante mucho tiempo en la junta directiva del Liceo.

El número 100 de la calle Rosalía de Castro (antes Salvador Moreno, famoso por las polémicas declaraciones de Rajoy) se ve ahora en medio de "una tormenta perfecta" que va "más allá" de las trabas que sufrieron en anteriores ocasiones, según advierten sus impulsores.

A finales de octubre, el Liceo Mutante recibió una orden de cese de actividad al carecer de licencia, pero Pena llama la atención sobre que lo que ellos organizan allí "no encaja del todo" en la ley estatal de espectáculos que se le pretende aplicar, sino que es más amplio: conciertos, cine, talleres de todo tipo, charlas… De hecho, "muchas veces venía la Policía Local y no sabía muy bien ni qué decirnos", apunta.

Por eso, los espacios autogestionados aspiran a que las administraciones articulen una normativa diferenciada y específica para su finalidad. Ahí se encuentra en este momento el Liceo Mutante, en fase de preparación de alegaciones con su abogado contra el expediente que le ha abierto el Ayuntamiento de Pontevedra.

El Ayuntamiento: "Pueden convivir"

Un Consistorio liderado por el BNG que asegura que "no tiene otra opción" que notificar el cese. "Lo comunicamos hace más de un mes. Había denuncias de un vecino y la Policía Local fue allí y levantó informe. No tiene licencia para actividad, por lo que se abrió expediente de disciplina urbanística", explica el concejal de urbanismo, Xaquín Moreda, consultado por Europa Press.

El gobierno de Miguel Anxo Fernández Lores, destacado opositor a la presencia de Ence en Lourizán, "desea que el Liceo Mutante regularice su situación" al valorar la actividad que desarrolla para la ciudad, pero rehúsa contestar a la cuestión de si la marcha de la planta provocará que los terrenos se revaloricen y la zona se ‘gentrifique’.

"Depende. Hay alguna unidad de actuación, pero aquellos terrenos están calificados en el plan general, que dice lo que se puede hacer y lo que no", señala Moreda. "Si el Liceo pide licencia, pueden convivir todas las actividades, si son respetuosas con la residencial", añade.

Por su parte, la asociación no descarta solicitar esos permisos, pero argumenta que se le exigirían requisitos que no corresponden "exactamente" a su actividad, que "no es lucrativa ni permanente".

"No es un vecino"

El denunciante que ha llevado al cese de la actividad del Liceo Mutante, una vez superadas otras denuncias en el pasado y hasta una pandemia como la de la Covid, se queja del ruido, según apuntan tanto los responsables de la asociación como el propio edil de urbanismo.

Ese ruido se debió a conciertos que este verano se trasladaron al patio en lugar de realizarse en el interior del local debido, precisamente, a la situación sanitaria. "No es un vecino", según Sara Pena, "sino un constructor" que acaba de adquirir dos parcelas separadas del centro cultural únicamente por otro terreno.

También es una constructora, justamente, la dueña de las instalaciones del Liceo, la que ha ejercido como arrendadora durante todo este tiempo. "En cualquier momento querrá construir… Ahora mismo no puede levantar un edificio pero sabemos que hay en marcha un proceso y que tiene la esperanza de poder hacerlo…", comenta la socia del Liceo.

Así las cosas, los impulsores de este proyecto lamentan que se estén dando "movimientos sin toda la publicidad que debería" haber y "empresas" que "rondan a los vecinos".

‘O Liceo resiste’

Hace días, el Liceo Mutante lanzó un mensaje a través de las redes sociales bajo el lema ‘O Liceo Mutante resiste’. Unas 50.000 personas lo leyeron y 8.000 interactuaron con el comunicado, de modo que se sucedieron las muestras de apoyo.

Asociaciones como el Cineclube de Pontevedra, que tiene previsto proyectar el documental ‘Mutantes‘ el próximo día 21, y la APDR (Asociación Pola Defensa da Ría) han reaccionado a la noticia del cese. Esta última, reclamando al Ayuntamiento que "explore formas de viabilidad" de este centro social "emblemático".

También insta este colectivo, de los más significados para lograr que Ence salga de la ría de Pontevedra, a que el gobierno de Lores investigue "la existencia de comportamientos urbanísticos especulativos en el barrio de Mollabao". En el caso de confirmarse, pide "estrategias para neutralizarlos".

Y es que la "intuición" lleva a los responsables del Liceo a temer que la "cada vez más próxima –y por todos deseada– marcha de Ence de la ría de Pontevedra convierte la línea de costa hasta Marín en un ansiado objeto de deseo para nuevos especuladores". Por ello valoran "más acciones y alternativas" y estudian "cómo hacer para seguir en la cultura autogestionada".